Japón lanza un presupuesto récord para reactivar su economía en el 2001

El Gobierno japonés aprobó hoy un proyecto de presupuesto récord de 84,9 billones de yenes (unos 136 billones de pesetas) para el próximo ejercicio fiscal (abril del 2000-marzo del 2001), en un nuevo intento de lograr la recuperación económica del país, a pesar de acumular un fuerte endeudamiento. El proyecto de presupuesto para el próximo año supera en un 3,8% al del ejercicio anterior. Japón calcula que esta inversión presupuestaria le permitirá registrar un crecimiento del 1,8% en el 2000, contra el 0,6% de este año.

El Gobierno de Keizo Obuchi, que trata de superar desde hace dos años la mayor recesión de la posguerra y acaba de adoptar un enorme plan de reactivación de 18 billones de yenes (28,8 billones de pesetas), prevé que este presupuesto permita un crecimiento económico de un 1,8% el próximo año, tras el 0,6% de este año. El ministro nipón de Finanzas, Kiichi Miyazawa, vaticinó una recuperación económica para el próximo año y prometió que será el "último" presupuesto expansivo.El borrador aumenta el gasto público en un 2,6% respecto al periodo anterior, por la necesidad de incluir medidas de apoyo oficial a la economía, que no acaba de despegar. Los ministerios y organismos gubernamentales tienen hasta el viernes próximo para discutir la propuesta o solicitar cambios en ella, ya que el 24 de diciembre está previsto que el Gobierno presente las cuentas del Estado para el próximo año fiscal al Parlamento.

Deuda al alza

El esfuerzo presupuestario será financiado principalmente mediante préstamos, lo que elevará la deuda al 132,9% del PIB a finales del 2001 (calculado en unos 580 billones de pesetas), frente al 120% actualmente, y el déficit, al 9,4% del PIB. Obuchi declaró que el nivel récord de endeudamiento no supondrá de momento una subida de impuestos.

El Ministerio de Finanzas prevé nuevas emisiones de bonos por 32,6 billones de yenes (52,1 billones de pesetas) para el próximo ejercicio, un 5% más que el pasado año, lo que elevará la deuda oficial a 85,8 billones de yenes (unos 137,3 billones de pesetas). "Contiene todo lo que es necesario, porque no vamos a volver a presentar nunca un presupuesto como éste", declaró el ministro de Finanzas, Kiichi Miyazawa, para justificar la fuerte elevación del déficit público. Por su parte, el primer ministro, Keizo Obuchi, indicó que el endeudamiento público no supondrá por el momento un alza de los impuestos. Si se aprueba el borrador del Ministerio de Finanzas, las emisiones de bonos representarán en el 2000 el 38,4% de los ingresos estatales.

Los presupuestos de defensa y de educación aumentarán ligeramente, mientras que la ayuda al desarrollo disminuirá y se reorientará principalmente hacia las zonas pobres de Asia. El servicio de la deuda ocupará, como en años anteriores, uno de los principales puestos del presupuesto y absorberá 21.960 millardos de yenes, un 10,8% más que el ejercicio anterior.

El anuncio del Ministerio de Finanzas fue acogido sin entusiasmo en el mercado. Según los analistas, la razón para esta pasividad estuvo en que la pasada semana se filtraron algunos detalles del plan que redujeron el efecto sorpresa de su presentación. El dólar estadounidense perdió ayer terreno en Tokio, en un mercado con pocas novedades que no se resintió al conocerse el plan de presupuesto para el 2000, que aumentará de nuevo el gasto público. Al final de la tarde, el dólar se situó en 102,90 yenes, por debajo de los 103,12 que registraba por la mañana, tras fluctuar de 102,80 a 103,40 yenes.

El dólar se debilitó en una jornada dominada por la escasez de movimientos y operaciones, donde algunos inversores buscaron registrar beneficios mientras la mayoría se mantenía al margen de las operaciones. Las ventas fueron lanzadas por empresas de seguros y bancos regionales, y contrarrestaron las compras de otros inversores locales.

Superávit comercial

Ayer también se conoció que el superávit comercial japonés de noviembre se redujo en un 39,8% respecto a octubre y alcanzó los 661.600 millones de yenes (1,05 billones de pesetas). El saldo comercial a favor de Japón, que ha caído en los últimos ocho meses, bajó un 25,7% respecto al mismo mes del año anterior. El Ministerio de Finanzas explicó que la causa de la abrupta reducción del excedente japonés se encuentra en el alza de las importaciones, la primera de los últimos 23 meses, de un 15,6%, que las sitúa en 3,2 billones de yenes (5,1 billones de pesetas).

Las importaciones crecieron en los productos petrolíferos, semiconductores, electrónicos y textiles. Las exportaciones totalizaron 3,8 billones de yenes (6,08 billones de pesetas), que, con una subida de 5,6 puntos, han sido las primeras de los últimos 14 meses. Los productos japoneses más comercializados fueron los componentes electrónicos para óptica y semiconductores, que tuvieron como destino principal los países asiáticos.