La Ertzaintza desarticula una red de "piratas" informáticos que falsificó 100.000 programas

Tres jóvenes de Rentería de entre 28 y 31 años han sido detenidos por la Ertzaintza como presuntos integrantes de una red que se dedicaba a falsificar programas informáticos y los vendía después a través de Internet a precios irrisorios. La policía vasca desconoce el enriquecimiento logrado por los tres arrestados con este negocio ilegal, aunque se ha incautado de casi 100.000 programas plagiados y calcula que el valor de lo defraudado suma varios cientos de millones. La banda ofertaba por 1.000 pesetas versiones piratas de programas que en el mercado cuestan 600.000.

Los tres piratas informáticos detenidos, R.G.G., de 30 años, A.M.A., de 31, y I.M.L., de 28, todos ellos residentes en la citada localidad guipuzcoana, pusieron en marcha su negocio en 1996, aunque hasta este año no comenzaron a distribuir masivamente los productos falsificados a través de Internet. Ocultos bajo el alias cibernético Conan, habían creado una organización ilegal de venta de programas plagiados a precios insignificantes.José Luis Pérez, representante legal de la Asociación Fonográfica y Videográfica Española (AFYVE), considera que la desarticulación de esta red supone "la operación policial más importante llevada a cabo en España contra la piratería informática por Internet". La Ertzaintza, que ha dirigido desde el principio las investigaciones, asegura que se ha incautado de uno de los principales alijos informáticos de todo el Estado. Los detenidos se encuentran en libertad provisional y a disposición judicial.

Últimas versiones

Los arrestados ofrecían en la red alrededor de 100.000 programas informáticos falsificados, la mayoría de los cuales correspondían a recopilaciones musicales, software, juegos para las máquinas Play Station, discos compactos con películas pornográficas y utilidades para ordenadores personales, todos ellos con las últimas versiones existentes en el mercado.

Programas especializados como el Autocad 14, utilizado por los arquitectos para realizar trabajos de diseño lineal y que cuesta entre las 500.000 y las 600.000 pesetas, se ofertaban a tan sólo 1.000 pesetas. Distribuían al mismo precio programas en tres dimensiones para publicitas -el 3D Max Autodex- o el Sofimage 3D, éste comprimido en un sólo disco, que en ambos casos también rebasan el medio millón de pesetas si se compran con licencia personalizada.

Un primer recuento del material decomisado por la Ertzaintza incluye unos 4.000 compactos que almacenaban unas 48.000 canciones de perfecta actualidad, según José Luis Pérez, de AFYVE. La mayoría de estas recopilaciones musicales se encontraban registradas en formato MP3, cuya capacidad de almacenamiento es amplísima.

La banda comenzó a ser investigada en el pasado mes de marzo tras las sospechas que levantó en la sección especializada en delitos de tecnología de la información de la Ertzaintza la venta ilegal en Internet de algunos productos informáticos piratas. Al principio se ofertaban en un tablero de anuncios (News) de la red con la contraseña Conan. Ún mes después, la banda abrió una página web con el nombre www.superconan.com.

La policía vasca presume que el más joven de los tres detenidos, I.M.L., es el cerebro del grupo. En su domicilio había instalado el centro de operaciones con material informático muy avanzado -seis ordenadores y once aparatos para la grabación de discos compactos, entre otros artilugios-, aunque también utilizaba una tienda de informática.

El pasado 1 de diciembre, agentes de la Ertzaintza sorprendieron a dos de los tres jóvenes cuando se dirigían con varios paquetes hacia una oficina de Correos para realizar el envío de varios pedidos y poco después fue arrestado el tercero.

La policía autonómica desconoce el alcance real del fraude que presuntamente han cometido estas personas, aunque en un peritaje realizado con urgencia han calculado que podría ascender a varios cientos de millones de pesetas. Las empresas afectadas y la sección policial de delitos informáticos están estudiando ahora los 8.000 compactos interceptados para evaluar la magnitud del fraude.

Tampoco se conoce el número de operaciones de venta que efectuaron y, consecuentemente, el enriquecimiento que les ha reportado esta actividad falsificadora. Al conocerse los hechos, las empresas afectadas por este presunto delito presentaron las correspondientes denuncias.

La Ertzaintza expuso ayer el material informático incautado a los detenidos./JESÚS URIARTE