Los dueños de perros peligrosos deberán probar su aptitud psicológica

Quien tenga o quiera tener como mascota a un animal peligroso deberá obtener una licencia que incluye, entre otros requisitos, un certificado de aptitud psicológica. Así lo establece la Ley de Tenencia de Animales Potencialmente Peligrosos, aprobada ayer en el Senado tras ser rechazadas las enmiendas de los grupos socialista y mixto, que consideran el texto aprobado "ambiguo", "impreciso" y "precipitado".La nueva ley, que será publicada en el BOE en los próximos días, considera potencialmente peligrosos a los animales de compañía "que tengan capacidad de causar la muerte o lesiones a las personas o a otros animales y daños a las cosas". No es una norma exclusiva para perros, incumbe a cualquier animal utilizado como doméstico, incluidos los pertenecientes a la fauna salvaje.

Este aspecto ha sido muy criticado por la oposición. El senador del Grupo Mixto Ramón Clemente cree que la ley permite que "una persona tenga en su casa tigres o leones". Manuel Acacio, del PP, responde que por fauna salvaje no se entiende especies protegidas, cuya tenencia está muy limitada, sino mascotas exóticas poco habituales, como iguanas o guacamayos.

Antonio Sánchez, del PSOE, considera que el texto aprobado "es imposible de aplicar porque no hay un censo previo". Según Sánchez, sería imprescindible contar con un registro central, que coordinara la vigilancia en municipios, comunidades autónomas y Estado, así como precisar la manera de identificar a los perros: "No sirve de nada contar con un registro si luego los perros van sin identificación".

Otras críticas de la oposición a la ley son que no prohíba el adiestramiento para defensa y guarda o las peleas; que no regule la cría, la esterilización o el sacrificio, y que no mencione la necesidad de hacer un control genealógico de las razas peligrosas.

Acacio explica que el texto es sólo "un marco legal", y que los reglamentos de las comunidades autónomas y de los Ayuntamientos serán los encargados de recoger los apartados que hayan quedado sin concretar en la ley.

Los reglamentos incluirán también, según la explicación del PP, un catálogo de razas de perros peligrosos, así como un listado de sus características, en función del tamaño, peso o fuerza de mandíbula, para ser aplicado también a perros sin raza.

Por último, la ley establece multas desde 25.000 a dos millones y medio de pesetas para quien tenga o adiestre perros potencialmente peligrosos sin licencia o sin tenerlos registrados.