Hacienda hará antes de mayo la devolución a los liberados de declarar

La Agencia Tributaria realizará la declaración de renta del año próximo (sobre los ingresos de 1999) a unos cinco millones de contribuyentes con salarios o pensiones inferiores a 3,5 millones de pesetas. De ellos, unos tres millones tendrán derecho a una devolución estimada en 100.000 millones de pesetas, que obtendrán antes del mes de mayo del año próximo.

El nuevo impuesto sobre la renta, que ha entrado en vigor este año y se declarará en el 2000, libera a unos cinco millones de contribuyentes de la obligación de presentar la declaración. En este caso están los que hayan percibido durante 1999 salarios o pensiones inferiores a 3,5 millones de pesetas anuales y/o quienes hayan obtenido otros rendimientos (cuentas corrientes, fondos de inversión, subvenciones para compra de vivienda) que no superen las 250.000 pesetas. Se excluyen aquellos que hayan invertido en compra de vivienda o en planes de pensiones.Con la normativa anterior ya existía un número importante de asalariados y pensionistas que no tenían obligación de declarar. El límite estaba en los 1,2 millones de pesetas con carácter general, y si a esto se le suman los actuales mínimos familiares, se puede llegar a la misma cifra de 3,5 millones de pesetas. Pero muchos de ellos, como sucederá ahora, quieren presentar la declaración porque se les ha retenido de más y solicitan la devolución. La diferencia ahora es que será la propia Agencia quien les haga la declaración, y que su devolución la obtendrán entre los próximos 15 de marzo y 30 de abril, antes que los demás (entre junio y diciembre).

Para ello deberán comunicar a la Agencia sus datos personales y, en su caso, si pagan pensiones por alimentos o tienen derecho a deducciones autonómicas, entre el 1 de febrero y el 31 de marzo próximos.

La Agencia cruzará esos datos con los que dispone del contribuyente a través de las retenciones y le remitirá el resultado. No habrá controles posteriores, al ser la propia Agencia quien hace la declaración, para lo cual deberá manejar y tener a tiempo unos 300 millones de registros informáticos.