El Hospital General de Catalunya presenta quiebra voluntaria

El Hospital General de Catalunya ha presentado ante los juzgados de Rubí un expediente de quiebra voluntaria, según confirmaron a Europa Press trabajadores del centro sanitario. Los trabajadores del centro señalaron que desconocían las cifras que ha presentado el hospital ante el juzgado, pero indicaron que la actividad continuaba desarrollándose en el centro con toda normalidad. Asimismo, dijeron que se les informó desde la dirección que la asistencia sanitaria estaba garantizada y que se abonarían los salarios.

El Hospital General de Catalunya se encuentra en crisis desde febrero de 1993, cuando presentó suspensión de pagos con una deuda de 12.600 millones de pesetas. En 1996 se levantó la suspensión de pagos tras la firma de un convenio con los acreedores que suponía una quita del 50% de la deuda y una espera de 15 años, con tres de carencia. Por tanto, el hospital debía empezar a pagar en 1999 la deuda pendiente. El primer plazo asecendía a 262 millones de pesetas.Tras la suspensión de pagos, el Hospital General de Catalunya, que desde su fundación en 1974 solamente atendía a sus socios, llegó a acuerdos con otras mutuas y compañías aseguradoras sanitarias para ampliar su volumen de actividad dando asistencia a los asegurados de éstas. En 1993, el hospital, que tenía una capacidad para 750 camas, estaba infrautilizado, ya que solamente disponía de 240 camas.

En 1998, a pesar de conseguir 135 millones de pesetas de beneficio en sus resultados operativos, la deuda que arrastraba y las amortizaciones arrojaron unas pérdidas de 1.118 millones de pesetas.

Esta ha sido la tónica de las cuentas del Hospital General en los últimos años, ya que en 1997 perdió 1.620 millones y en 1996 fueron 1.258. El año 1995 fue el único en el que obtuvo beneficios, con un resultado positivo de 1.790 millones. En 1994 perdió 2.400 millones, en 1993, 2.940; en 1992, 4.190 y en 1991 fueron 1.410 millones.

En diciembre de 1998 sus deudas ascendían a 16.400 millones de pesetas, de los cuales 5.250 correspondían a la deuda pendiente del convenio firmado con los acreedores en 1996. Los principales acreedores en diciembre de 1998 eran Hacienda y la Seguridad Social, con 5.300 millones. Además, debía a diversos bancos (Mindland, BBV y BCH) un total de 3.780 millones de pesetas, créditos que están avalados por el Instituto Catalán de Finanzas y garantizados mediante hipotecas sobre los terrenos y el edificio que ocupa el hospital. Gran parte de estos créditos vencían en 1999.

Los ingresos del hospital ascendieron en 1998 a 5.960 millones de pesetas, la mayor parte de los cuales (2.420 millones) procedían de las prestaciones a miembros de la Mutua General de Cataluña de Previsión Social y de servicios prestados al Servicio Catalán de la Salud (1.748 millones). Por asistencia a particulares ingresó 712 millones y por asistencia a miembros de otras mutuas 560 millones.

El Hospital General de Catalunya, que desde la suspensión de pagos de 1993 está presidido por Pere Narbona, cuenta con una plantilla de 760 trabajadores.