El PP mantiene el crédito fiscal en Álava como gesto de armonía con las otras diputaciones

La Diputación de Álava, gobernada por el PP, hizo ayer un gesto de acercamiento hacia las otras dos diputaciones, y al PNV en concreto, al mantener en su proyecto de presupuestos el crédito fiscal del 45% a las inversiones superiores a 2.500 millones. Estos incentivos, recurridos por Madrid el año pasado y anulados por el Tribunal Superior vasco, están pendientes de que el Supremo dé firmeza a la sentencia. La Diputación alavesa ha cedido en esta cuestión y pedirá al Gobierno central que retire otros recursos en materia fiscal antes de fin de año, para, a cambio, buscar el respaldo de los nacionalistas.

El difícil equilibrio que está obligado a mantener el Partido Popular en la Diputación de Álava le ha llevado a adoptar una medida que en principio puede parecer contradictoria, aunque en el fondo tiene un sentido político. Los presupuestos forales presentados ayer incluyen un anexo que mantiene el crédito fiscal a las inversiones mayores de 2.500 millones de pesetas. Este polémico incentivo permite a las empresas recuperar el 45% de lo invertido mediante la deducción de impuestos y no sólo fue criticado por el propio PP, sino que fue anulado el pasado mes de junio por el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco. No obstante, la sentencia no es firme al haber sido recurrida al Tribunal Supremo.Con esta medida, el gobierno de Ramón Rabanera ha querido "seguir la línea de las otras Juntas Generales", las de Vizcaya y Guipúzcoa, y mantener la unidad de acción entre las tres diputaciones vascas. Según explicó ayer el diputado alavés de Hacienda, Juan Antonio Zárate, el PP quiere solucionar estos conflictos mediante la negociación. Su idea consiste en propiciar la retirada de la mayor parte de recursos interpuestos por el Gobierno central, y sobre todo el que propició la cuestión prejudicial elevada al Tribunal de Luxemburgo, "antes de final de año". Estas concesiones podrían servir de punto de arranque para reformular la norma sobre los créditos fiscales. "Espero que la negociación pueda establecer unas soluciones con el Gobierno del Estado y que se proceda a una retirada de recursos, y, en ese ámbito, establecer una negociación también sobre esta norma", explicó Zárate.

El diputado de Hacienda insistió en buscar acuerdos antes de que termine este año, por varias razones. "Es conveniente no sólo por la negociación presupuestaria sino, sobre todo, porque nos podemos encontrar con un pronunciamiento del Tribunal de Luxemburgo que todo el mundo entiende que es preferible evitar".

Beneplácito de la OCT

Zárate recalcó que "todos los planteamientos" sobre los aspectos fiscales que afectan a los tres territorios "parten con el visto bueno del Órgano de Coordinación Tributaria" (OCT), formado por las tres diputaciones y el Gobierno vasco. "No hay ningún desmarque, ni ideas de ningún partido político. Todo está consensuado". Entre los anexos del presupuesto foral alavés -y también en lo de las otras diputaciones- aparece ya el cambio acordado entre las administraciones para rebajar de cinco millones a tres el límite para declarar el IRPF.

Toda esta serie de concesiones anunciadas por el PP en Álava conducen a la búsqueda de un acercamiento con el PNV. La Diputación sólo tiene garantizados los votos del equipo de gobierno (PP y Unidad Alavesa), es decir, 18 de un total de 51 procuradores en las Juntas Generales. De modo que necesita el respaldo de alguno de los principales grupos de la oposición, o los nacionalistas o los socialistas. Zárate defendió ayer su proyecto: "Son unos presupuestos irreprochables. Ojalá avancemos en la negociación para poder hablar de temas concretos y que no se planteen descalificaciones a priori".