La inversión de Ford en Almussafes deja en el aire unos 1.000 empleos de la planta de motores

A pesar de que el presidente de Ford Europa, Nick Scheele, aseguró ayer en Valencia que la inversión de 40.000 millones de pesetas -23.000 millones menos de los previstos inicialmente- garantizarán el mantenimiento del empleo en Almussafes, las cuentas no cuadran. El hecho de que el nuevo motor, el I4, se vaya a construir en las mismas líneas y con el mismo personal que ahora hace el Zetec SE, que pasará a producirse en Gales, mantiene la incertidumbre sobre el futuro de los cerca de 1.000 trabajadores de la planta del modelo HCS cuando desaparezca en el 2002.

Los sindicatos hicieron ayer rápidamente las cuentas: actualmente trabajan en las dos plantas de motores de Almussafes un total de 1.600 operarios. Unos 1.000 se dedican a la producción del HCS, 400 a la del Zetec SE y 200 realizan trabajos auxiliares comunes a ambos. Tal y como adelantó ayer EL PAÍS, el nuevo motor sustituirá al Zetec SE, ya que la compañía concentrará la producción de todas las versiones de este motor en la planta de Bridgend.Precisamente las líneas que queden vacías en Almussafes por la marcha de este modelo de motor se adaptarán para producir el I4 a partir de enero del 2001. El presidente de Ford Europa señaló que, a pesar de que la previsión es fabricar 700.000 unidades año del I4 frente a las cerca de 300.000 al año del Zetec SE, no será necesario ampliar plantilla, es decir los 400 empleados actuales serán suficientes. La incógnita es saber qué pasará con los 1.000 empleados que hacen el HCS cuando en el 2002 deje de fabricarse al haber llegado al final de su vida. "No está decidido hasta ahora", contestó Nick Scheele, quien se entrevistó con el presidente del Consell, Eduardo Zaplana.

Sabor agridulce

El presidente del comité de empresa, Juan Luis Naranjo, manifestó ante esta situación que pedirán a la multinacional "garantías de que se va a mantener el empleo". Naranjo, que anunció que el comité se reunirá esta próxima semana para analizar la nueva situación y plantear sus propuestas a la compañía, valoró el hecho de que la firma del óvalo haya optado por Almussafes para realizar esta inversión, "lo que consolida a la factoría para el futuro", pero añadió que esta satisfacción "se torna agridulce cuando se comprueba que no hay garantías de que el empleo se vaya a mantener". Más duro fue el secretario general de UGT, Rafael Recuenco. "Hoy han vendido ilusión, pero la ilusión no crea empleo", aseguró el dirigente sindical, que añadió: "Hace apenas cinco años la Generalitat aportó 10.000 millones para una planta que ahora se va a desmantelar [en referencia a la que produce el Zetec SE], y ahora dará 7.000 millones [cifra que, según Recuenco, habría comprometido el Consell para atraer la inversión] para una inversión que no garantiza el empleo".

Desde CC OO, el secretario general Joan Sifre mantuvo tesis similares: "Las inversiones hay que convertirlas en empleo. Hay que empezar a negociar para que haya un buen resultado final". Por su parte, el secretario general del sindicato en Ford, Sebastián Salido, señaló que, una vez consolidada la factoría con esta inversión, "es necesario que la empresa ponga las cartas boca arriba y se hable del futuro del empleo". Salido advirtió del peligro que supondría que la multinacional tuviera en mente trasladar parte del personal a empresas proveedoras que podrían instalarse en el parque de proveedores ubicado junto a la planta de Almussafes. De hecho, Scheele señaló que en la futura ampliación del parque podrían desembarcar parte de las empresas que trabajan para Ford en el proceso de fabricación de motores, firmas a las que irán parte de los 40.000 millones, según el presidente de Ford Europa.

El nuevo motor I4, desarrollado por Ford en colaboración de los técnicos de Mazda -una de las marcas del grupo- se producirá en exclusiva en Almussafes para Europa. Otras plantas, Dearborn (EE UU), Chihuahua (México) y Hiroshima (Japón) también fabricarán este modelo para las plantas de sus zonas de influencia. Estas últimas factorías también producirán el I5, modelo que se especuló también podía adjudicarse a Almussafes, aunque Scheele dijo que este motor "está diseñado para el mercado norteamericano". El presidente de Ford Europa no quiso adelantar las versiones en que se producirá el I4 ni qué vehículos equipará.

Lo que sí explicó es el plan de la marca que ha originado la inversión en Almussafes, una reestructuración de la fabricación de motores en Europa, y que afecta también a las dos factorías que competían con la planta valenciana. Bridgend producirá todas las versiones del Zetec, para lo que recibirá una inversión de 30 millones de dólares adicional a los 300 invertidos en los últimos años. Colonia será la encargada de producir el V6, un nuevo motor para los todoterrenos de la marca. Ford no pudo ayer cuantificar la inversión que realizará en la planta alemana para fabricar este modelo. "Todos ganan", dijo ayer Scheele al resumir estas inversiones de futuro.