Un experto revela que una minoría de sevillanos protegió a Velázquez

Diego Velázquez contó desde su juventud con un grupo de sevillanos que apoyó su trabajo artístico. El catedrático de Historia del Arte de la Universidad de Sevilla Vicente Lleó resaltó ayer la importancia de este grupo que allanó la carrera del pintor. "Los clientes sevillanos de Velázquez se nos revelan como una élite, una minoría, que seguramente compraría sus obras directamente al pintor y que sería un grupo de apoyo", señaló Lleó.

El catedrático Lleó destacó la importancia de esta poderosa minoría en una ponencia expuesta en el monasterio de la Cartuja de Sevilla, dentro de los actos del Symposium Internacional Velázquez. Este congreso, que se inició el pasado lunes encuadrado en los actos por el cuarto centenario del nacimiento del pintor, será clausurado mañana por el doctor Jonatham Brown.Lleó añadió que este "grupo de apoyo y soporte" le permitió a Velázquez "una situación envidiable". La tesis de Lleó viene avalada por la escasa documentación sobre el periodo sevillano de Velázquez. El pintor, que nació en 1599, abandonó Sevilla camino de Madrid en 1622. Los datos de su primera juventud son escasos, destacó el catedrático.

"Éste es el periodo más misterioso de Velázquez. Tenemos mucha documentación oficial y administrativa, pero escasísimas referencias en cuanto a aspectos personales, como cartas, opiniones... Hay un aura de misterio en todo este periodo sevillano", explicó Lleó. El catedrático recordó que los últimos documentos publicados sobre el pintor sevillano inciden, sobre todo, en "el Velázquez madrileño o romano".

La escasez de documentos sobre la época sevillana "se hace todavía más sorprendente al tener en cuenta" que las transacciones de pinturas quedaban fijadas en protocolos, dijo Lleó. "Cualquier pintor que compitiera en el riquísimo mercado [sevillano] regularizaba sus transacciones. Hay miles de documentos sobre esto; pero Velázquez no aparece en ninguno", recalcó el catedrático de Historia del Arte.

El argumento de Lleó es que Velázquez no figura en estos protocolos porque esa minoría que le apoyaba le compraba directamente los cuadros. El duque de Alcalá sería, entre otros, uno de los mecenas del joven pintor. Esta situación se repetirá en Madrid. Velázquez encontrará allí "admiradores de su obra que lo sostendrán". "En Madrid se le dispensó un absoluto trato de favor", concluyó el catedrático de Historia del Arte.