Los rectores demandan un nuevo modelo de financiación universitaria

Los rectores de las universidades andaluzas solicitaron ayer desde Jaén, donde celebraron una reunión de coordinación, un nuevo sistema de financiación para el próximo cuatrienio basado en criterios de objetivos cumplidos. Es decir, que cada universidad pueda hacer previsiones de proyectos a realizar por los cuales recibiría una cantidad de dinero suficiente para llevarlos a la práctica. De esta forma entienden que puede incrementarse la calidad de la enseñanza universitaria pública.

El rector de la Universidad de Jaén, Luis Parras, fue el más explícito al indicar que lo que pretenden es "afinar más" en el reparto de fondos a las universidades. Se debe tener en cuenta, matizó, el número de alumnos que hay en cada territorio universitario, pero también si hay más estudiantes de letras o de ciencias, porque estos requieren un presupuesto mayor. "Hay que distribuir mejor", añadió el rector de Jaén.Los responsables universitarios andaluces reclaman también que los acuerdos sobre financiación tengan una vigencia de cuatro años, con el objetivo de que puedan llevar adelante programas sin tener que estar cada doce meses mirando los presupuestos.

De lo que no quieren hablar, de momento los rectores, es de cantidades. Eso sería, según Guillermo Martínez, rector de Cádiz, acotar demasiado un terreno que ellos quieren plantear mucho más allá de las cifras. Se trata, dijo, de saber si se apuesta por la calidad. Esta será la forma de competir con los centros universitarios privados que están empezando a comer mucho terreno a las universidades públicas.

Parras explicó que el conjunto de universidades andaluzas tiene este año 70.000 millones de pesetas para su financiación, cantidad que se incrementará hasta los 77.000 millones en el año 2000. Antes de decir en qué porcentaje debería incrementarse ese presupuesto incluido en el proyecto de la Junta, lo que pretenden es hacer un estudio técnico en el que se definan las necesidades de cada universidad.

Por su parte, Guillermo Martínez explicó que quieren evitar la imagen de los rectores con la mano tendida exigiendo más dinero. Primero ellos tendrán que definir sus prioridades y después rendir cuenta de lo que han hecho con los presupuestos.

Los rectores, según explicó el de Sevilla, Miguel Florencio, han sido "bastante razonables" hasta ahora en sus reivindicaciones y en la Consejería de Educación perciben una buena predisposición a aceptar los planteamientos que ayer discutieron en Jaén.

Entre los temas debatidos se encontraba también el decreto sobre el acceso a la Universidad que los rectores andaluces no ven claro. No beneficia al alumno y necesita una moratoria para su aplicación, concluyeron.

Andalucía, reclamaron los rectores, debe ser escuchada antes de establecer el distrito abierto en España, Lo que les preocupa es la letra pequeña del texto definitivo que se redacte desde el Gobierno central, ya que el distrito único andaluz ha funcionado "a la perfección" en palabras de Miguel Florencio. Ahora carecería de sentido establecer un mecanismo que perjudique los avances logrados al establecer un examen único, un tribunal común y un mismo criterio de corrección para todos los estudiantes.