Las presidenciales uruguayas de hoy marcarán el fin del bipartidismo
Cerca de dos millones y medio de uruguayos están convocados hoy a las urnas para elegir al nuevo presidente de la República en los comicios que se presentan como los más reñidos de la historia. La posibilidad de que, por primera vez, un candidato de izquierda, Tabaré Vázquez, del Encuentro Progresista-Frente Amplio, gane unas elecciones, según pronostican todas las encuestas, ha movilizado a los dos partidos que tradicionalmente se han repartido el poder. Para ello no han escamoteado críticas y argumentos a la hora de descalificar a su rival. Vázquez, médico oncólogo de prestigio internacional y dirigente del Partido Socialista, fue alcalde de Montevideo entre los años 1990 y 1995.El gobernante Partido Colorado, que presenta a Jorge Batlle, ha planteado las elecciones como una guerra entre el liberalismo y el marxismo, al tiempo que el Partido Nacional, o Blanco, del ex presidente Luis Alberto Lacalle, propone un Gobierno de coalición con los blancos porque es "la verdadera respuesta contra el marxismo". "Hubo sectores del Frente Amplio que reivindicaron la lucha armada, vemos entonces que la democracia requiere vigilancia", dijo Lacalle.
Los dos partidos del oficialismo, que han estado coaligados en el último Gobierno, presidido por el colorado Julio María Sanguinetti, han recordado durante toda la campaña la presencia en el Frente Amplio del Movimiento de Liberación Nacional Tupamaros (MLN-T), la mítica guerrilla uruguaya de la década de los setenta hoy transformada en fuerza política. Por convencimiento o por electoralismo, colorados y blancos recelan del MLN y lo presentan como un riesgo para la democracia.
Gane quien gane en los comicios de hoy, Uruguay encara un nuevo escenario, cual es el fin del bipartidismo y la entrada en escena de una tercera fuerza política, claramente de izquierda, con posibilidades de discutir la presidencia de la República a los dos únicos partidos que han gobernado desde 1922 (con la interrupción de la dictadura). Entre las dos fuerzas de centroderecha y la coalición de izquierda aspira a introducir una cuña la candidatura Nuevo Espacio del senador Rafael Michelini, que se define como socialdemócrata.
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