Victoria Camps dice que la educación es clave para superar la falta de compromiso social del ciudadano

Hay dos vías para combatir el exceso de individualismo del ciudadano actual: una, educativa, formar a los jóvenes para que se comprometan con la colectividad; y otra, política, desterritorializar el poder para acercarlo a la gente común. Victoria Camps, catedrática de Ética en la Universidad Autónoma de Barcelona, ofreció esta conclusión ayer en Madrid, en una conferencia acerca de La identidad ciudadana, en el marco del segundo ciclo de la Fundación Santillana sobre La educación que queremos.Según sentenció Camps, "el ciudadano de hoy es más individuo que ciudadano". El compromiso social se reduce a pagar impuestos -cuando se pagan-; cumplir más o menos con las leyes, que sobre todo se entienden como una relación de lo que se permite hacer y lo que no; y, por último, votar, que tampoco es obligatorio.

La pasividad de los ciudadanos se completa con el laissez faire que muestran ante los políticos, en quienes delegan toda la acción social. Y los políticos son a su vez responsables de la falta de compromiso de los ciudadanos porque tampoco se libran de la corrupción y contribuyen al descrédito de las leyes.

Todo ello es, en opinión de Camps, consecuencia del nacionalismo moderno. La idea de Nación-Estado reduce el concepto de ciudadanía a una lista de derechos y deberes.

Camps definió el individualismo como una herencia de la tradición liberal que ha pervertido el sentido de la democracia, "que no es otro que el autogobierno, la participación y la cooperación". El absentismo electoral, el fraude fiscal, la corrupción o la falta de debates son, a su juicio, síntomas claros de que, contrariando los postulados clásicos de Adam Smith, el egoísmo del individuo no supone un beneficio público.

La falta de compromiso explica, según Camps, la nostalgia de la ciudadanía republicana, y aclaró que ésta no tiene nada que ver con oponerse a la monarquía, sino con formar a las personas para alcanzar el ideal griego de "ciudadano virtuoso", que en los tiempos actuales estaría encarnado en "ese ciudadano que pone parte de su libertad al servicio de los demás, porque el deseo de más libertad y autonomía pública sólo se alcanza compartiendo".

Entre las propuestas de Camps para superar el individualismo está la vuelta a la comunidad. La consecuencia política sería distribuir la soberanía hasta hacerla llegar al entorno del municipio. Por otro lado, la catedrática propone recuperar una identidad cultural que comprometa a los ciudadanos en la toma de decisiones. En este caso, el medio principal, más que las leyes, es la educación, "sin la cual no se consigue gran cosa", explicó Camps.

Valores concretos

Por último, Camps defiende una educación concreta en valores, "que no hable de tolerancia y de convivencia en abstracto, que enseñe a resolver problemas implicando a la escuela, el municipio, los ciudadanos, las asociaciones...".

Esta nueva etapa del ciclo La educación que queremos tiene por objeto destacar que la formación de los ciudadanos es una de las más importantes finalidades del sistema educativo y que requiere del apoyo y de la participación de todos los agentes sociales. En la conferencia inaugural, De súbdito español a ciudadano europeo, el académico y consejero delegado del Grupo PRISA, Juan Luis Cebrián, analizó la evolución que ha vivido el concepto de ciudadanía en España desde el franquismo hasta la actualidad. Cebrián alertó contra el "doctrinarismo de café" que ha alentado a la derecha política y matizó que los españoles han logrado ser ciudadanos de la Europa unida porque han renunciado "a radicalismos falaces y a dogmas de fe política".

Las siguientes conferencias correrán a cargo del premio Príncipe de Asturias de 1999 Raymond Carr, miembro de la Academia Británica y de la Real Academia de la Historia, que hablará el 16 de noviembre sobre El fin de siglo y la ciudadanía en España y Gran Bretaña, y el ex director de la London School of Economics y ex comisario europeo Ralf Dahrendorf, cuya ponencia tratará el 30 de noviembre sobre Los ciudadanos de la Europa del siglo XXI.