La turca "Propaganda" despunta entre las favoritas a la Palmera de Oro

La película Propaganda, del turco Sinan Cetin, una parábola sobre la inutilidad de las fronteras, se perfila como una de las candidatas a hacerse con el primer premio de la Mostra. En una edición en la que la sección oficial ha ofrecido un pobre nivel, sólo el filme turco y la francesa Le derrière han dotado de cierta originalidad a la competición. En el marco del festival ayer se presentó el Diccionario Espasa del Cine Español, elaborado por el crítico y estudioso Augusto M. Torres.

A partir de una anécdota, la construcción de una alambrada fronteriza entre Turquía y Siria, Propaganda escenifica una feliz fábula sobre las nacionalidades y la burocracia. Es un film divertido y amable, que se deja ver con facilidad pese al excesivo efectismo que el director Sinan Cetin pone en su empeño. La utilización de la música, el empleo del gran angular en la mayoría de los planos y un final demasiado dependiente de la estética del videoclip emborronan una película digna que, junto con la francesa Le derrière, constituye de lo poco salvable de la competición. Por ello, no porque sus méritos sean muchos sino por deméritos de las demás películas, tiene todos los números para figurar en el palmarés final. No merecería figurar la egipcia Gannat al shayateen (El paraíso de los demonios) de Oussama Fawzi, una pobre adaptación de la novela de Jorge Amado Doña Flor y sus dos maridos, que no capta el ánimo festivo de la obra original evidenciando una alarmante ausencia de ritmo cinematográfico y de sentido del humor. Por otra parte, la organización de la Mostra anunció ayer que la película Agnes Brownwe-Un sueño hecho realidad, dirigida por Anjelica Huston, se proyectará en la gala de clausura mañana jueves. Por otra parte, ayer se presentó en Crisol el Diccionario Espasa del Cine Español en el marco del festival. Elaborado por el crítico Augusto M. Torres, la obra recoge 1050 entradas de películas españolas y 550 de realizadores directores de cine, actores, guionistas, productores y otros profesionales del cine. Se trata de una nueva versión, mucho más ampliada, del anterior diccionario de bolsillo del propio autor. La introducción de la obra, que cuenta con una breve historia del cine español, ha corrido a cargo de Manuel Gutiérrez Aragón.

Pero quizá el aspecto más novedoso y posiblemente polémico del libro es la defensa que realiza su autor del cine español de los años cuarenta y principios de los cincuenta -"cuando se hacía el mejor cine en el mundo, también en España", comentó-, y de las películas de la transición, cuando aparecen directores arriesgados que explotan el nuevo escenario de libertad como Almodóvar, Bigas Luna o Eloy de la Iglesía. El crítico indicó que "muchos se rasgarán las vestiduras" debido a que es un cine producido en la dictadura, pero subrayó que algunos estudiosos extranjeros tienen la misma opinión. El libro fue presentado por José Sanmartín, director de la UIMP en Valencia, y Joan Álvarez, director de la Escuela de Guionistas.