Barón Rojo edita un doble álbum recopilatorio con cuatro temas nuevos

"Siempre hemos estado ahí, pero teníamos la opción de remasterizar nuestros viejos temas y la aprovechamos", explica el guitarrista y miembro fundador de Barón Rojo, Armando de Castro. El doble compacto Cueste lo que cueste resume lo mejor de la trayectoria de la banda durante los años ochenta y añade cuatro piezas inéditas, además de readaptar Resistiré, canción emblemática de sus mejores tiempos de popularidad y ventas.

Armando de Castro, una figura con todos los honores, junto a su inseparable hermano Carlos, el bajista José Luis Sherpa Campuzano y el batería Hermes Calabria, asombraron por su capacidad para desarrollar y ejecutar grandes composiciones de rock duro. Barón Rojo fue, en la primera mitad de los años ochenta, el héroe nacional de la música rock, que paseó su buen hacer y su prestigio por Europa y Suramérica. Divergencias internas y cierto cansancio y desilusión terminaron por dividir al cuarteto clásico, que partió sus caminos hace ya 10 años. "Las victorias tienen muchos padres, pero nadie quiere responsabilizarse de las derrotas", comenta el guitarrista."Creo que el éxito de Barón Rojo fue del bloque. Los porcentajes son más discutibles. Carlos y yo aportábamos el lado más duro; Hermes, la parte más funki-jazzística, y Sherpa, el filopop. Pero cuando entraron los personalismos en juego la banda se resintió. Hace tres años les propusimos regresar a la banda porque habíamos perdido nuestra base rítmica. Ha pasado el tiempo y las asperezas están limadas. Sin embargo, el planteamiento de ellos era mucho más ambicioso, con una gran inversión detrás. El nuestro es el de remontar el vuelo poco a poco".

Durante la presente década, Barón Rojo apenas ha gozado de plataformas promocionales. Dos discos que pasaron bastante inadvertidos y conciertos allá donde se les requería no fueron suficientes argumentos para que el público expresara su sorpresa por la continuidad del grupo. "El recopilatorio no es una jugada comercial, si bien está claro que nos puede ayudar. Hemos vuelto a nuestra antigua discográfica porque la propuesta era buena y no había ningún resquemor por nuestra parte. Tenemos grabado un disco en directo que ha quedado muy bien y seguramente lo editemos en el futuro de alguna manera", cuenta Armando.

Vigencia

Según el veterano guitarrista, el rock mantiene plena vigencia y no se le puede acusar de falta de evolución. "Es un tópico del que se habla mucho. El folk, el bolero o el jazz son géneros que también parecen haberlo dicho todo y, sin embargo, a veces se fusionan con otros estilos y otras permanecen autóctonos".Armando asegura que Barón Rojo, cuyo vigésimo aniversario se cumplirá el próximo año, aún tiene cuerda para rato. "Vamos a seguir funcionando pase lo que pase con este disco. Si luego ocurre que vendemos grandes cantidades, pues mejor que mejor. Por suerte, todavía atraemos a un público joven. Tocamos normalmente para un público de entre 500 y 1.500 espectadores, y son mayoría los chicos entre los 17 y 23 años. Lo sabemos porque luego de los conciertos nos gusta charlar con ellos. Saben quién es Barón Rojo gracias a sus hermanos mayores, sus tíos o incluso sus padres. Puede que también les guste el hardcore o el death metal, pero entienden que son dos distintas concepciones del rock que no tienen por qué estar enfrentadas".

El bajista Angel Arías y el batería Valeriano Rodríguez completan la formación actual de Barón Rojo, una banda que cree en la futura continuación del género que practica. "El rock duro lleva treinta años de historia y tiene otros treinta por delante".