_
_
_
_

Un mecenas privado

Tiene 1.400 butacas y una admirable acústica, según todos los expertos. Algo que llena de orgullo al hombre que ha hecho posible que el antiguo cine Massimo de Milán resurgiera de sus cenizas convertido en un hermoso teatro musical: el nuevo auditorio. Se llama Agostino Liuni, tiene 54 años, tres hijos mayores y una empresa de pavimentos; vende moquetas, para ser exactos. Nadie sabe exactamente las razones que han decidido a Liuni a invertir 1.700 millones de pesetas y dos años de su tiempo en la construcción del nuevo Auditorio de Milán. Un mecenas secreto que al final ha visto revelada su identidad en la prensa milanesa, a pocas horas de la solemne inauguración. Liuni, un tipo de aspecto común, asegura que ha costeado el auditorio para compensar a su hijo mayor de una pérdida: cuando era pequeño, le impidió acudir al conservatorio y le obligó a estudiar una carrera técnica para hacerse cargo después de la empresa familiar.El auditorio viene a llenar un hueco considerable en Milán, que, como el resto de Italia, sufre de una carencia crónica de salas sinfónicas. El país del bel canto está dotadísimo de teatros de ópera, pero las orquestas de música clásica sufren para encontrar salas con la debida acústica para interpretar sus repertorios.

Más información
Riccardo Chailly abre el nuevo Auditorio de Milán con una triunfal "Resurrección" de Mahler

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_