"La clase obrera existe. Existo yo, por ejemplo"

Yolanda Pérez (Tarragona, 1973) empezó a trabajar a los 17 años. Ahora es educadora de guardería y estudiante de psicología.Pregunta. ¿Consideras especiales las próximas elecciones?

Respuesta. Sí. Por primera vez, desde que tengo conocimiento, es posible que haya un cambio.

P. ¿Qué cambio? ¿En qué percibes que se contraponen CiU y los socialistas?

R. El Gobierno de Pujol practica una política de derechas, orientada a la clase media y alta. Maragall se decanta más hacia la izquierda. Aunque no me creo mucho eso de la izquierda y la derecha, los partidos cambian en el poder. En todo caso considero que para las clases más expuestas y sensibles, es mejor una política de izquierdas que de derechas.

P. ¿Qué diferencias encuentras entre una política de derechas y otra de izquierdas?

R. Las izquierdas buscan hacer cosas en beneficio de la clase obrera. Las derechas, no. Siempre tienden a apoyar la clase social más alta. Eso se percibe en el tratamiento que la derecha hace en aspectos como los temas sociales, la educación... todo. Son clasistas, no buscan la igualdad.

P. Te has referido a la clase obrera, ¿crees que aún existe?

R. Existe. Existo yo, por ejemplo. La emigración y los hijos de la emigración tienen muchos números para serlo. De hecho, lo son. Se distinguen por el nivel cultural y socioeconómico, por los pocos recursos para acceder a estudios y a sitios apropiados donde encontrar un lugar de trabajo, y por la poca promoción social.

P. Si unes clase obrera a inmigración, ¿crees que la lengua es una gran diferenciación en esta sociedad?

R. Sí. A mí me ha pasado. Por el hecho de ser hija de andaluces sentí cierto rechazo cuando no dominaba el catalán. ¿Por parte de quién? De profesores en la enseñanza primaria. También, de hecho, se marginan los barrios. Desde hace unos años ya no tanto. Creo que desde la izquierda se ha impulsado la integración cultural. Este mal rollo de marginación del que hablaba me parece que empezó a remitir en los años 1983-1984. Entonces empecé a notar que la sociedad catalana estricta no hacía ya separaciones.

P. ¿Qué diferencias observas entre Pujol y Maragall?

R. Cuando se acercan las elecciones hacen campaña. En las campañas todo queda muy bonito, pero a la hora de la verdad, Maragall, si es necesario, se decanta hacia el centro. Aun así, entre estos dos candidatos prefiero a Maragall porque soy de izquierdas. Pujol, como personaje, no me gusta nada.

P. ¿Cómo dibujarías el pujolismo?

R. En estos momentos, encuentro como obra positiva suya la normalización lingüística. Y negativa, todo lo demás. Trabaja para las clases medias y altas, no favorece a las clases media y obrera. Además, no es bueno que haya estado tanto tiempo en el poder. Que cualquier partido se perpetúe en el poder aún es peor con mayorías absolutas. Es preferible la pluralidad a la mayoría absoluta.

P. ¿Votas usualmente?

R. Sí, a IC. Soy de izquierdas y considero que es el partido que mejor representa mi forma de pensar. Conozco a personas de la lista en Tarragona, y la labor que este grupo ha hecho como oposición en el Ayuntamiento. Han movido cosas. Soy de un barrio y lo veo.

P. ¿Qué votarás en las próximas elecciones?

R. La lista conjunta de IC y socialistas. Juntos tienen más posibilidades de sacar más escaños, que es de lo que se trata.