Lemas AGUSTÍ FANCELLI

Hoy, una trampa: lemas electorales. Sin moverse de casita, que zascandilear tras los candidatos resulta extenuante. A ver qué tal.Convergència i Unió: "Primer les persones". Suena a naufragio, a capitán gritando "¡las mujeres y los niños primero!", que es lo que efectivamente se escuchará en muchos buques autonómicos de perder esta formación las elecciones. Como dato positivo, hay que subrayar que no se introducen jerarquías entre las personas que van antes en el salvamento: todas juntas al mogollón. Ahora que Pujol tiene ya colocados a sus hijos, evidentemente no necesita ordenar la tanda.

PSC-Ciutadans pel Canvi: "Canviar és guanyar". Lenguaje bancario. Parece el lanzamiento de un nuevo fondo de inversión que va a ser la pera en materia de ahorro fiscal. Un lema, por otra parte, muy adecuado al ideario maragalliano de la presente campaña: muchos más conceptos que éste por el momento no se los hemos escuchado. ¿Lema reversible? Veamos: "Guanyar és canviar". La ganancia del cambio frente al tipo de cambio ganador. Ni por ésas salimos del Nikei.

Partido Popular: "Decisius per a Catalunya". Pragmático. Soso. Y normativo como el que más. Esa "a" tras "per" suena a rayos, es decir a normativa. Pero, hombre, don Alberto, uno que piensa hablar en castellano en el Parlament cuando le pase por la barretina podría mostrarse más suelto en materia preposicional autóctona.

Iniciativa per Catalunya: "Planta cara". ¿Para qué? ¿Para que te la partan? A menos que uno tenga la seguridad de tenerla muy dura, en cuyo caso puede permitirse la chulería. En fin, que cuando el chiste sale tan fácil, da por pensar en el coche de Carlos Sainz: puede mejorarse.

Esquerra Republicana: "Aire fresc". Estética ambipur. Devorolor. Fina y segura. Fa y los limones caribeños. Pastillas contra el mal aliento. Lo malo es que los tonos oscuros del retrato de Carod hacen que el lema parezca más una recomendación para él que una alusión a sus soluciones políticas.

Esquerra Unida i Alternativa: "Ara! Catalunya d"esquerres". Sin comentarios. El momento histórico ya los hace por nosotros. Y no podían ser más malévolos.