Economía encuentra indicios de que la unión de Heineken y Cruzcampo vulnera la competencia

El Servicio de Defensa de la Competencia del Ministerio de Economía ha pedido al Tribunal de Defensa de la Competencia un informe sobre la compra de Cruzcampo por Heineken porque ha encontrado indicios de que la operación supondrá una posición de dominio del mercado cervecero español, sobre todo en Andalucía. Tras la compra de Cruzcampo, líder nacional con el 24% del mercado, Heineken (que controla El Águila) suma el 40,1%. Sin embargo, en el mercado andaluz el control supera el 75% y en algunas provincias se acerca al 90%.

El Servicio de la Competencia ha enviado al Tribunal de la Competencia la solicitud para que éste, en un plazo de tres meses, remita un informe pertinente sobre la adquisición de Cruzcampo por Heineken. El tribunal que preside Amadeo Petitbó debe determinar si existe posición de dominio y si elimina la competencia en algunas zonas como apuntan las primeras apreciaciones del servicio.La petición es un nuevo capítulo de un proceso de venta que desde el pasado día 10 de junio, cuando se firmó la compra de Cruzcampo por Heineken por 108.000 millones de pesetas, planteó serios interrogantes. Madrid pidió a Bruselas que le dejase investigar y la Comisión Europea dio su autorización el pasado 17 de agosto.

El Gobierno de Bruselas señalaba que, "dadas las peculiaridades del mercado español de la cerveza, la Comisión Europea considera que las autoridades españolas están mejor situadas para examinar la operación y en particular la existencia de problemas a nivel regional". El Gobierno español formuló su petición de reenvío de la Comisión (la primera que efectúa) con el argumento de que la operación anunciada en junio pasado podría crear o reforzar una posición de dominio en determinados mercados del territorio nacional.

En el caso de que el Tribunal de Defensa de la Competencia encuentre que, efectivamente, se producen problemas de colusión, puede obligar a Heineken a desprenderse de parte de su participación en el nuevo grupo en aquellas zonas que así lo considere, ya que se producen disparidades entre Andalucía, donde prácticamente barre del mercado a la competencia, y otras áreas.

El mercado de la cerveza no es homogéneo, y cada zona geográfica cuenta con un líder en ventas. Así, Cruzcampo controla entre el 60% y el 65% del mercado andaluz, mientras que El Águila (participada por Heineken al 72%) posee el 10%. En la zona de Levante, Cruzcampo controla el 15%, mientras El Águila posee cerca del 29%; en la cornisa cantábrica, Cruzcampo copa el 34% y El Águila solamente tiene el 5%; en las dos Castillas, Cruzcampo cuenta con el 16% del mercado, igual porcentaje que su ahora socio. En esta última zona, Mahou roza el 40% del mercado, porcentaje que llega al 60% en la Comunidad de Madrid.

El mercado catalán está liderado por Damm, con el 45%, y le sigue San Miguel, con el 20%. Entre Cruzcampo y El Águila cuentan en la actualidad con siete fábricas de las 21 que están abiertas en todo el territorio nacional. El mercado cervecero español lleva varios años estancado y las diferentes empresas productoras no tienen otra salida para ganar cuota que por la compra de empresas productoras. La producción del mercado cervecero nacional ascendió en el año 1998 a 24,773 millones de hectolitros, lo que supone un aumento del 0,9% sobre año 1997.

A pesar de la buena marcha del consumo en general el mercado cervecero español no logra despegar. El consumo de cerveza por persona fue en 1998 de 66,4 litros.