Las cartas del consejero Antoni Comas a los pensionistas vulneran la ley electoral

La Junta Electoral de Barcelona ha vuelto a recriminar al consejero de Bienestar Social, Antoni Comas, sus malas artes políticas. Ayer lo hizo con un acuerdo en el que resuelve que las cartas remitidas por Comas a los pensionistas el pasado día 1 "van más allá de la obligación de informar de los acuerdos de Gobierno y como consecuencia infringen por su contenido (...) la Ley Orgánica del Régimen Electoral General". La junta da la razón a la queja presentada por Iniciativa per Catalunya-Verds (IC-V), que estudia denunciar a Comas por "delito electoral" al observar reiteración en este tipo de infracciones. Bienestar Social recurrirá la resolución, ya que considera que las misivas sólo informaban.

Bienestar Social envió las cartas el día siguiente de que el Consell Executiu aprobase la paga extraordinaria para compensar la pérdida de capacidad adquisitiva de las 70.000 personas que cobran una pensión no contributiva o asistencial, y una semana más tarde de que el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, convocase las elecciones autonómicas desde el Aneto. En las primeras líneas de la misiva, cuyos destinatarios fueron pensionistas, usuarios de residencias geriátricas y diferentes colectivos de la tercera edad, el consejero Comas explicaba: "La Generalitat tiene como objetivo prioritario la mejora de la calidad de vida de sus ciudadanos". Tras ello, aseguraba: "Nos dirigimos a usted para manifestar nuestra voluntad de servicio y nuestra total disponibilidad para procurar atender las demandas o sugerimientos que nos quiera hacer". Finalmente, Comas se despedía: "El presidente de la Generalitat, el señor Jordi Pujol, desea que los miembros de su Gobierno demos a los ciudadanos todo el apoyo que podamos". Reiteración en la infracción La resolución de la junta electoral entiende que no hay lugar para adoptar ninguna medida para la ejecución de la resolución, "por haber suspendido ya su remisión (de las cartas) el Departamento de Bienestar Social", cuestión que comunicó el propio Comas a la junta electoral el martes pasado. Sin embargo, el gabinete de Antoni Comas comunicó ayer mismo que recurrirá la decisión ante la Junta Electoral Central, ya que, a su juicio, los escritos remitidos a los pensionistas no formaban parte de ninguna campaña publicitaria. En las alegaciones anteriores enviadas a la junta electoral Comas ya aseguraba que las misivas formaban parte de "la práctica habitual de trabajo de este departamento", y que la única pretensión era "mejorar la calidad de los servicios públicos". No es la primera vez que la Junta Electoral de Barcelona recrimina al consejero Comas sus actividades políticas. Hace sólo dos semanas, esta institución prohibía a Bienestar Social desarrollar cualquier tipo de publicidad sobre su gestión en el marco del primer salón para la tercera edad, FiraGran, que se celebró en el Moll de la Fusta (Barcelona) entre el 6 y el 12 de de este mes. Por la reiteración de este tipo de infracción, el diputado Jordi Guillot adelantó ayer que IC-V está estudiando demandar al consejero Antoni Comas por "delito electoral". "Son ya muchas las veces que se están utilizando medios públicos y hemos de evitar de una vez por todas este tipo de manipulaciones", señaló. Según Guillot, "volvemos a estar ante otra prueba del uso y abuso que el Gobierno de Pujol hace de las instituciones para hacer propaganda política".