Los ecologistas recogen firmas contra el tren veloz a Valladolid

Una veintena de organizaciones ecologistas y colectivos vecinales y sociales de Madrid y Segovia, en ambas vertientes de la sierra del Guadarrama, han rechazado los trazados del tren de alta velocidad propuestos por el Ministerio de Fomento, tanto en lo que respecta al actual corredor de Villalba como el que habría que abrir en Soto del Real, por considerar a ambos como perjudiciales para el medio ambiente. Estos grupos, que han constituido la llamada Plataforma de Afectados por el tren de alta velocidad Madrid-Valladolid, iniciaron el domingo en La Granja (Segovia), una campaña con el fin de recoger firmas que acompañen a las diversas alegaciones al proyecto, que se encuentra actualmente sometido a información pública.En una serie de paneles informativos, los representantes de la plataforma denunciaron que, a su juicio, el trazado provoca faltas graves al medio ambiente (impactos acústicos, destrucción de bosques y modificación de cauces de los ríos).

Asimismo, expresaron que la excavación de un doble túnel de cerca de 30 kilómetros, tal y como está proyectado en el trazado por Soto del Real, conllevará muchas dificultades y que habrá impactos importantes sobre el Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares y sobre los pinares de Valsaín, que es una zona de especial protección para las aves, un lugar de importancia comunitaria a efectos de la Red Natura 2000 y una futura zona de especial conservación.

Mejora de las líneas

Según manifestó el portavoz de la plataforma, Francisco Heras, la alternativa a esta futura obra es la mejora de las líneas ferroviarias convencionales en el cuadrante noroeste, lo que resultará más económico y rentable.El tramo ferroviario de alta velocidad Madrid-Segovia, de la variante Norte-Noroeste, tiene cinco alternativas de trazado entre Madrid y Segovia, correspondientes a los corredores de Villalba y de Soto del Real.

El primero de los corredores tiene su origen en la estación de Chamartín y circula paralelo a la actual línea Madrid-Hendaya hasta Las Matas, donde continúa paralelo a la autovía A-6 hasta cruzar la sierra del Guadarrama por un túnel para el que se han considerado dos alternativas posibles.

El corredor de Soto del Real, que también parte de Chamartín, sigue la línea férrea Madrid-Burgos y la carretera M-607, para bordear Soto del Real por el oeste y cruzar Guadarrama por un túnel con las otras tres alternativas: Valsaín, La Granja norte y La Granja sur.

Los cálculos previstos del coste para la nueva línea ferroviaria oscilan entre los 175.000 y los 210.000 millones de pesetas para las alternativas del corredor de Villalba y los 250.000 millones de pesetas para cada una de las tres opciones del corredor que partiría de la localidad de Soto del Real.