El PSOE denuncia una supuesta estafa a la Caja de Ávila de 875 millones

La empresa Construcciones Industrializadas Castellanas, SA (Coinsa), cuya implantación está paralizada en el polígono de Vicolozano (Ávila), ha cometido, según denunció ayer el PSOE, una presunta estafa por valor de 875 millones de pesetas. Los gestores de Coinsa han desaparecido tras cobrar al menos una parte de un crédito concedido por la Caja de Ávila con el aval de las subvenciones recibidas del Ministerio de Economía y la Junta de Castilla y León, que eran de casi el 50% de la inversión total, de 1.944 millones.

Según la denuncia realizada por el portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Ávila, Tomás Blanco, que responsabilizó del asunto a las Administraciones autonómica y central que gobierna el PP, los gestores de la empresa han desaparecido "tras un montaje fraudulento premeditado que ha constituido una estafa, no sólo económica, sino también a la ciudad, porque prometieron crear 207 puestos de trabajo". La empresa tenía en proyecto instalar una factoría dedicada a la fabricación de elementos prefabricados de hormigón para la construcción. Siempre según la denuncia del PSOE, Coinsa adeuda alrededor de 50 millones a los proveedores que suministraron materiales para la construcción de sus instalaciones, a escasos kilómetros de la capital abulense, donde la factoría se encuentra a medio construir.

Fuentes de la Caja de Ahorros de Ávila han confirmado la concesión del préstamo en diciembre de 1997 a modo de anticipo, de modo que la empresa dispusiera del dinero mientras recibía las ayudas oficiales, que sirvieron de aval al crédito. Los responsables de Coinsa han tenido disponible el préstamo hasta hace tres meses, según las mismas fuentes de la entidad financiera, que desearon expresar prudencia ante el asunto y declinaron aclarar si se ha retirado la totalidad del importe del crédito o sólo una parte.

El Comisión de Incentivos Regionales del Ministerio de Economía y Hacienda concedió una ayuda de 486 millones mientras que la Junta de Castilla y León, a través de la Agencia de Desarrollo Económico, aprobó una de 388 millones y otra destinada a la promoción del empleo por 15 millones.

Según el PSOE, a esto habría que unir otros cien millones de ayuda para sufragar los intereses del préstamo con la entidad financiera.

Por su parte, el Delegado de la Junta de Castilla y León en Ávila, Félix San Segundo, ha confirmado que Coinsa tenía previsto recibir el 49,96% de la inversión en ayudas aunque hasta ahora no ha recibido "ni una peseta". "El expediente fue desde la Agencia de Desarrollo [de Castilla y León] a Incentivos Regionales [del Ministerio de Economía] y aludiendo al buen proyecto, presentado en un tiempo récord, dos o tres meses, concedió un porcentaje no muy usual, un 25% del total, lo que luego fue complementado con un 20% de Incentivos Territoriales a un interés especial, a lo que se añade el crédito para subsidiar los intereses del crédito, que suponía un 4,96%", explica San Segundo.

El polígono industrial de Vicolozano, situado poco antes de llegar a la capital abulense por la N-110 (Soria-Plasencia) desde la N-VI, construido en 1990, sólo pose en la actualidad tres instalaciones: la factoría de quesos fundidos Luxtor, inaugurada en 1997, un concesionario de camiones y las naves sin terminar de Coinsa.

El polígono fue levantado con el propósito de que se instalase la multinacional alemana Pilz que, dedicada a la fabricación de los discos compactos, anunció su llegada a mediados de los años ochenta. La empresa quebró sin llegar a instalarse.

Después, en la campaña electoral de las elecciones autonómicas de 1995, la Junta anunció qeu se ubicaría allí IDP Technologies, dedicada a la informática aplicada a la detección y control de vehículos. Al año siguiente, la empresa presenta el proyecto y pide ayudas para invertir 2.300 millones. Hasta ahora.