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Ocho municipios quieren que Madrid limite el tráfico para reducir el ozono

"El tráfico es uno de los principales responsables de la contaminación atmosférica por ozono. Madrid es el principal productor de ozono y el exportador de este contaminante al área metropolitana, por eso la Comunidad debe exigir al Ayuntamiento de Madrid que adopte medidas urgentes para limitar el tráfico rodado y reducir sus emisiones de óxido de nitrógeno". Esta es la reivindicación que encabeza el documento de propuestas para mejorar la calidad del aire en la región que ayer entregó la edil de Medio Ambiente de Coslada, Maribel Albarrán (IU), a sus homólogos en otros siete municipios madrileños, con los que ha formado un frente común contra el ozono. La intención de los ocho consistorios, que están entre los más afectados por las altas concentraciones de ozono registradas este verano, es tener listo dentro de 15 días un documento consesuado para presentarlo al gobierno regional. En el mismo exigirán que se tomen medidas para que el próximo verano no vuelva a producirse este tipo de contaminación atmosférica. Aunque varios ayuntamientos ya manifestaron sus quejas individualmente durante el estío, la de ayer fue su primera reunión.

Incidencia en la salud

Las propuestas elaboradas por Albarrán (IU) subrayan la necesidad de acometer estudios epidemiológicos sobre la incidencia de este gas en la salud. También exigen saber en qué medida influye el tráfico aéreo en su concentración. Por último, Albarrán, aseguró que España va por detrás de otros países europeos, ya que aún no ha transpuesto a su ordenamiento jurídico la directiva-marco sobre evaluación y gestión de la calidad del aire, adoptada por la Unión Europea en 1996. Por su parte, Juan García, representante de Ecologistas en Acción, recordó que este verano la contaminación por ozono troposférico ha superado 69 veces los 180 microgramos por metro cúbico de aire, el nivel considerado como de alerta a la población, ya que por encima del mismo puede ocasionar problemas de salud a las personas más sensibles. En este grupo se incluyen los ancianos, los niños y las personas con problemas respiratorios.

El ozono es un gas nocivo que se forma en las capas bajas de la atmósfera (troposfera) como consecuencia de la combinación de altas temperaturas y emisiones contaminantes procedentes de coches e industrias de combustión.

La normativa europea, recogida en un real decreto de 1995, obliga a las autoridades a informar a la población cuando la concentración de ozono supera los 180 microgramos por metro cúbico de aire como valor medio en una hora. Por encima de los 360 microgramos -nivel que no ha sido alcanzado nunca en la región- se declara la alerta por riesgo grave para la salud.

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