Religión con 'agostidad'

El presidente de mi Comunidad anuncia que en Formación Profesional (FP) han de incluirse clases de religión católica. Me viene a la mente la agostidad (expresivo agravante ideado por Julia Otero) ante la supresión -in extremis- de su programa -máxima audiencia, interés social- por los dueños de la emisora: la Conferencia de Obispos -vaya por Dios-, que argumenta no sé qué sobre nueva orientación. Ésta debe sonarle a las comunidades protestantes, que -parte del aluvión de críticas- califican la medida de las clases de "un principio de integrismo religioso"; ahora pienso en lo de "conocer la historia para no tener que repetirla": este verano estoy leyendo sobre los trascendentales cambios religiosos en Europa en el siglo XVI: la Iglesia católica reconoció que hasta 1530 no tomó conciencia de la protesta general ante sus malos usos, condenó a los líderes -primero sociales (Huss, Wycliff) y luego disidentes de su propio seno (Savonarola, Lutero, Zwinglio, Calvino)-, provocando no sólo el cisma religioso, sino la guerra, al ver los soberanos la fractura social que se producía al seguir los dictados de la jerarquía religiosa, que, en su dominio, despreció las reflexiones de las universidades y optó por la represión, estimando un éxito la contención en España atribuida a la Inquisición: léase a un castellano viejo / actual, El hereje, Miguel Delibes.Y creo que, sin olvidar las auténticas reivindicaciones del cristianismo de base, los madrileños y españoles vamos a defender el laicismo constitucional que nos hemos dado tras grandes costes de nuestros antepasados.-