La gala de la danza cuenta con una amplia representación de bailarines vascos Combina piezas de ballet clásico con coreografías contemporáneas

VIENE DE LA PÁGINA 1 El espectáculo, que comenzará a las 20.00 horas, ofrece la posibilidad de realizar un recorrido por diferentes estilos de la danza; desde el ballet clásico más puro hasta el lenguaje contemporáneo más vanguardista. El bailarín navarro Ion Garnika improvisó un símil con la gastronomía. "La gala", dijo, "es como un menú refinado de degustación; hay un poco de lo mejor, así no empalaga". "Lo mejor", tiene en algunos casos denominación de origen; existe una amplia representación de bailarines vascos en la gala. Lucía Lacarra, natural de Zumaia, recaló ayer en el País Vasco para mostrar la técnica y el estilo que estuvo obligada a perfeccionar en el extranjero. Pasó por la compañía de Víctor Ullate, trabajó con Roland Petit en el Ballet Nacional de Marsella y desde 1997 es bailarina principal del San Francisco Ballet. Lacarra compartió ayer escenario -y lo volverá a hacer hoy- con el bailarín Oscar Torrado, primera figura del Ballet Nacional de Cuba. Ambos representarán el adagio del segundo acto de El lago de los cisnes, una de las piezas más tradicionales del repertorio clásico. En este mismo estilo se enmarcan las actuaciones de Yuri Yonovsky, del Ballet de Boston, junto a la solista del American Ballet Theatre, Carmen Corella, en Don Quijote, o la de Joaquín de Luz y María Giménez en el Cisne negro. El contraste llegará de la mano del donostiarra Urtzi Aramburu y Yolanda San Martín. Los dos jóvenes bailarán Un ballo, una pieza coreografiada por Jiri Kylián sobre música de Ravel en clave contemporánea, que permitirá un acercamiento más natural al trabajo siempre innovador de Blanca Li. En este caso, la granadina abordará A Madeleine, una pieza creada por ella misma a partir de la música de Satie. Ha sido necesario realizar un encaje de bolillos para cuadrar las fechas de ensayos de todos los bailarines que participan en la gala. Pero el resultado, el espectáculo que se ofrece al público, lo merece a juicio de todos ellos. Jone San Martín, que bailará una pieza contemporánea con Garnika, aseguró ayer: "Es un lujo ofrecer un programa tan variado". El público asistirá al encuentro de diferentes personalidades y distintas formas de entender y expresar el lenguaje de la danza dentro de un espectáculo que dará para mucho más. Los bailarines se conocen, compartieron escenario en la Expo 98 de Lisboa, repitieron la experiencia hace dos días en Palma de Mallorca, y así llegaron ayer, rodados, a San Sebastián.