Alberto Fernández plantea las autonómicas como un duelo entre el PP y el nacionalismo

A un lado, el Partido Popular (PP); al otro, todos los demás partidos, que son nacionalistas. El presidente del PP de Cataluña, Alberto Fernández Díaz, ha optado por esta adaptación de la teoría de las dos orillas en clave nacionalista como argumento básico para acudir a las autonómicas y tratar de romper la previsible bipolarización entre el candidato de CiU, Jordi Pujol, y el del PSC, Pasqual Maragall. En una entrevista concedida a la agencia Efe, Fernández Díaz aseguró que la verdadera bipolarización se producirá "entre el PP y el nacionalismo", ya que, en su opinión, el PSC "ha apoyado durante 20 años un modelo clónico del de CiU" en el ámbito de la identidad. Según el análisis del dirigente conservador, las fuerzas políticas catalanas han adoptado en el Parlament una actitud seguidista de los planteamientos de CiU. Alberto Fernández reiteró que uno de los ejes básicos de la estrategia del PP será denunciar, en el marco de un discurso "moderado" y "centrista", el "escoramiento" de Pujol hacia posiciones nacionalistas y contraponerlas a "la cultura de la normalidad" que a su juicio impulsa el PP. El líder regional ha sido confirmado esta semana como candidato de su partido para las autonómicas, a pesar de que medios de la dirección nacional del PP apuestan por el ministro portavoz, Josep Piqué, como futuro hombre fuerte de la formación en Cataluña después de los comicios. Alberto Fernández aseguró que Maragall tiene un perfil "abstracto" y advirtió de que podría liderar tanto un Gobierno de CiU "como un cóctel a la balear" con anguitistas, independentistas, Iniciativa y socialistas.