La Junta andaluza volverá a subir las pensiones por encima de la inflación

La Junta de Andalucía sigue echando el pulso al Gobierno central en materia de pensiones y volverá a subir el próximo año las pensiones más bajas "le guste o no le guste a Aznar" por encima de la inflación, según anunció ayer en Jaén el consejero de la Presidencia, Gaspar Zarrías, y sin esperar a revisar el Pacto de Toledo. Zarrías lamentó que el Gobierno descalificase la idea y que ahora la asuma. Trabajo, por otra parte, propone incluir la prestación de desempleo en el consenso del Pacto de Toledo ahora limitado a pensiones.

Se armó, dijo ayer Zarrías, una "escandalera" al hacerse pública la medida de la Junta andaluza y ahora se adopta desde Madrid. El consejero Zarrías, no obstante, duda de que se vaya a aplicar efectivamente esta subida de las pensiones mínimas en el conjunto de España, porque, en su opinión, detrás de estas declaraciones lo que hay es un "tufillo" electoral. "Ojalá fuese verdad, pero nadie se lo cree", dijo el consejero. La Junta, añadió, sí volverá a hacer efectivo por segundo año consecutivo un incremento superior a la inflación de las pensiones asistenciales y no contributivas, que tiene como objetivo ir acercándolas al salario mínimo interprofesional.El Ejecutivo de Aznar llegó a pedir a la Junta en marzo que no pagase las ayudas complementarias a los pensionistas y llevó el caso al Tribunal Constitucional. El incremento aprobado por el Gobierno de Manuel Chaves para este año ha supuesto abonar 9.395 pesetas extras para los andaluces con pensiones no contributivas y 12.750 pesetas para los que tienen pensiones asistenciales. Según cálculos de la propia Junta han sido 156.000 los andaluces beneficiados por una medida pensada "precisamente para los más desfavorecidos". La nueva subida, explicó el consejero, podría multiplicarse "por dos o por tres".

Absoluta necesidad

Zarrías considera "impresentable" que en época de bonanza económica el Gobierno esté dispuesto a dar más de un billón de pesetas a las compañías eléctricas y no tome medidas "para la gente que más lo necesita".El Ministerio de Trabajo, Manuel Pimentel, ha propuesto abordar la subida de las pensiones mínimas en el marco del Pacto de Toledo, que se perfila como el tema estrella del próximo año. El Gobierno toma posiciones, y su secretario de Estado de Seguridad Social, Juan Carlos Aparicio, ha pasado la semana en Santander, en el curso Bases para un debate sobre protección social en el siglo XXI, repitiendo la absoluta necesidad de mantener el consenso político para la renovación del citado pacto. Aparicio dio ayer un pequeño paso al frente y presentó una lista con 10 temas que en su opinión deberían debatirse. Pero se limitó a enumerar los puntos. Lista no cerrada

"No quiero condicionar el debate exponiendo la postura del Gobierno antes de iniciar las discusiones". Además, para no dejar abierta ninguna puerta, Aparicio insistió en que la lista de temas era una simple aproximación, y que "en ningún caso" está cerrada. Sólo se permitió "recordar" que la situación en la que se debatirá la reforma es "más serena que la de hace cinco años".

Aparicio dijo que en opinión del Gobierno habría que hablar al menos de 10 cuestiones. "La primera, claramente, sería incluir las prestaciones por desempleo, para que pueda extenderse el acuerdo en este punto", empezó el secretario de Estado. Acto seguido colocó las "prioridades de solidaridad", y recordó que las que se fijaron en 1995 -viudedad de menores de 60 años con cargas familiares y orfandad- han mejorado considerablemente en estos años. "Queda también la ubicación definitiva del complemento a mínimos", y habrá que decidir si es un área contributiva o no lo es.

Llamada al consenso

Aparicio llamó también a consensuar las características del fondo de reserva y destacó la necesidad de profundizar en "la aplicación de criterios de contributividad en fórmulas concretas". Una cierta armonía de criterios para favorecer el acceso al mercado de trabajo de quienes tienen más dificultades también sería deseable.El secretario de Estado propone, además, definir los criterios de las cotizaciones para conciliar la solidaridad entre sectores y regímenes. Fijar por consenso las relaciones institucionales entre administraciones, la reordenación administrativa de la Seguridad Social y una mayor homogeneización de los regímenes son las propuestas restantes.

En un aspecto mucho más técnico, Trabajo informó también ayer que la Seguridad Social ha recaudado por vía ejecutiva en los seis primeros meses del año 68.384 millones de pesetas, 2.140 millones más que en el mismo periodo del año anterior. Esta recaudación supone un incremento del 3,23%. También ha crecido la recaudación de bienes embargados, que alcanzan un valor global de 1.615 millones de pesetas, frente a los 1.003 de 1997. "Ha habido un crecimiento y subrayo que el segundo semestre es desde hace 10 años mejor que el primero", apuntó.