La bella desconocida

Así se le suele conocer a la catedral de la capital palentina, en donde este año se exhibe esa increíble exposición itinerante de Las Edades del Hombre, cuya visita resulta obligatoria. Pero igual apelativo se le pudiera aplicar a las distintas facetas - incluida la culinaria - de esa artística y monumental provincia castellana. Y es que esta tierra ofrece unos estupendos productos. Desde las truchas salvajes a los cangrejos que vuelven a renacer y las carnes de ternera. Por supuesto sus maravillosos lechazos y sin olvidarnos de una gran curiosidad, la Cenina de Villarramiel. Por no citar las joyas de su huerta. Desde los dulces y enanos guisantes, a las nacaradas cerezas y las ciruelas claudias, pura melosidad. En cuanto a sus recetas, las mejores son la chanfaina, las menestras de verduras, las sopas de ajo, las delicadas y enjutas alubias blancas de Saldaña, los guisos de caza y por supuesto los asados de lechazo. Se dice que la zona de Carrión de los Condes no es zona de asados. Hay una tradición secular y hogareña de elaborar el cordero lechal entreasado, es decir asado en cazuela. Sin horno, al fuego directo, quien sigue respetando la más pura tradición local al respecto es Pilar Pedrosa, en su restaurante La Estrella del bajo Carrión de Villoldo, quien nos recomienda para su entreasado que se haga siempre en cazuela de porcelana. Restaurante La estrella de Bajo Carrión: Es sin duda una de las paradas gastronómicas obligadas en Tierra de Campos y como reza el titulo una autentica estrella de la culinaria palentina. Las hermanas Pedrosa, Pilar en cocina, Merche en sala junto con Paula no sólo han continuado la labor iniciada por sus padres sino que la han catapultado a la fama, sobre todo desde la puesta en marcha de su restaurante en su actual ubicación en Villoldo (a 25 kms de Palencia) hace ahora veintidos años. Comenzó la cosa con una culinaria palentina respetuosa con el recetario de la abuela que han sabido potenciar más gracias a su adaptación aligerada si perder su esencia debido en parte a la promoción de los mejores productos de su entorno (pimientos de Torquemada, pichón de palomar, hongos de la sierra de La Culebra, corderitos lechales de la localidad, derivados del pato de Villamartín de Campos). Las estrellas de su carta siguen siendo las tradicionales: Las alubias blancas, viudas, de la Vega de Saldaña( en su época con hongos), las pencas de acelga, la menestra de verduras, el salmón salvaje y por supuesto el lechazo en todas sus versiones. Como detalles innovadores el suculento y delicado revuelto de hongos, cebolla confitada y foie gras, o la ensalada templada de manos de cerdo y lengua al aceite de olivas negras. Postres modernos y muy livianos como el plátano caramelizado o el milhojas de manzana. Mas de veinte clases de variedades de aceite para mojar el pan recién hecho. Bodega muy completa. Dirección: Ctra. Palencia - Riaño, Km. 29,600. T.C: Todas.Tlf. 979 / 82 70 05. Cierra: Los lunes. Precio medio: 4.000 ptas. Parking: Propio.