El secretario de los socialistas en Álava asegura que el PNV no gobernará la Diputación Foral

El secretario general de los socialistas vascos, Fernando Buesa, aseguró ayer que el PNV no mantendrá la Diputación Foral de Álava. Buesa, que evitó concretar si ese compromiso supone que van a apoyar al candidato del PP, Ramón Rabanera, sí dejó muy claro que descarta gobernar con los populares, por lo que se quedarán en minoría. El PP y UA sólo dispondrán de 18 de los 51 junteros. "El diputado general de Álava no será del PNV", aseguró tajante Buesa. Para la alcaldía de Vitoria, la elección mañana del candidato popular, Alfonso Alonso, parece segura, salvo que el PNV apoye al PSE.

Socialistas y populares siguen librando la batalla de Vitoria. Cada día crecen en intensidad las acusaciones mutuas y se aleja la posibilidad de llegar a un acuerdo que facilite el gobierno compartido de la Diputación de Álava y el Ayuntamiento de Vitoria. El secretario general del PSE de Álava, Fernando Buesa, aseguró ayer que la propuesta de liderar el cambio político en Álava -el PSE desde el Ayuntamiento y el PP desde la Diputación Foral- no es una invención socialista, sino una propuesta del ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, algo que se ha apresurado a negar el secretario general de los populares, Javier Arenas. "Nunca aceptaré que ahora lo nieguen", declaró ayer Buesa. "El pensamiento político del PP es inconsistente, y por lo que veo sus dirigentes no tienen palabra. Con esas personas no se puede ir a ningún sitio", agregó. Pero aunque parece descartado el acuerdo con el PP, ayer Buesa aclaró que tampoco van a permitir que el PNV mantenga la Diputación Foral si finalmente presenta candidato gracias al apoyo de EH. Esa parece ser la clave del escenario final, con una pequeña variante en el caso del Ayuntamiento de Vitoria.

Gobierno solitario

En esta situación, el PP gobernará en la Diputación en la más absoluta de las soledades, sólo con 16 -a lo sumo dos más de UA- de los 51 escaños, lo que deja la puerta abierta a una moción de censura en cualquier momento, ya que PNV y PSE disponen de 25 junteros. Otra posibilidad sería la de pactar con otros partidos enmiendas totales a los presupuestos. El portavoz del PNV, Joseba Egibar, aventuró ayer ese panorama. "Seguro que el PSE apoya la investidura del PP, aunque sea en desacuerdo", declaró, "porque Álava se ha convertido en razón de Estado en España". Respecto al Ayuntamiento de la capital alavesa, el despliegue de medios y cargos públicos que mañana desplazará el PP a Vitoria, con Javier Arenas a la cabeza, hace impensable que, a última hora, decidan ceder la alcaldía al candidato del PSE, Jesús Loza, con lo cual los socialistas se votarán a ellos mismos.

De los 27 concejales del Ayuntamiento de Vitoria, el PP tiene nueve; la coalición PNV-EA, siete; el PSE, cinco; EH, tres; Unidad Alavesa dos e IU uno. El popular Alfonso Alonso será nombrado alcalde con sus votos y los de UA, once en total, el mismo apoyo que obtendría la candidata del PNV, María Jesús Agirre, si los partidos de Lizarra votaran en bloque, algo improbable.

La única posibilidad de sorpresa reside en el PNV, que al no tener nada que perder podría dar sus votos a la lista socialista, con lo que Loza obtendría 12 votos por once del PP. En ese caso, la fiesta de los populares se quedaría en agua de borrajas. Sería una decepción, ya que los conservadores están tan seguros de que el abogado de 32 años Alfonso Alonso será el nuevo regidor de Vitoria que se han permitido incluso organizar, en colaboración con el departamento de prensa municipal, el reparto de acreditaciones para los medios que deseen asistir al pleno.

Curiosamente, el secretario del PNV, Ricardo Ansótegi, aclaró ayer que el PNV sólo va a respetar las listas más votadas del PSE, EH y EA, pero no dijo nada de los populares, lo que añade suspense al pleno municipal de mañana en la capital alavesa al dejar la puerta abierta a que el PNV apoye a la lista socialista.

El consistorio estará presidido, además, por una mesa de edad compuesta por los concejales de mayor y menor edad, que serán ambos del PP: Javier Maroto, de 27 años, y Benedicto Barrios, con 59 cumplidos.

Por su parte, el lehendakari, Juan José Ibarretxe, solicitó ayer a la sociedad vasca que admita "todo tipo de manifestación plural en términos políticos", es decir que asuma la "legitimidad" de todos los partidos para realizar coaliciones de cara a garantizar los gobiernos en Euskadi. "Debemos admitir que una sociedad normalizada es aquella que asume con naturalidad que se den todo tipo de coaliciones y alianzas", dijo.