La economía creció un 3,6% en el primer trimestre pese al deterioro del sector exterior

La economía española ha conseguido en el primer trimestre del año casi neutralizar el deterioro del sector exterior, al crecer un 3,6%, apenas una décima menos que en el último trimestre de 1998, si bien la tendencia es a una suave desaceleración desde principios de 1998. Con respecto a los países del euro, España supera por dos puntos la media de crecimiento económico. El consumo de los hogares aumentó un 4,3% y la inversión en construcción se aceleró al 10,4%. El empleo, por el contrario, ha visto reducido su crecimiento al 3,3%, cuatro décimas menos que a finales de 1998.

Pese a que el sector exterior ha elevado a 1,9 puntos su aportación al crecimiento económico en el primer trimestre, dos décimas más que en el periodo anterior, la economía española mantiene un alto ritmo de crecimiento. Según publicó ayer el Instituto Nacional de Estadística (INE), la economía creció un 3,6% en el primer trimestre del año con respecto al mismo periodo del año anterior. Esto supone una décima menos que el resultado del último trimestre de 1998 (3,7%), con una tendencia suave a la baja desde el punto máximo alcanzado en el primer trimestre de 1998 (4,2%). Hay que tener en cuenta que las series estadísticas de la contabilidad nacional se han revisado al alza -una media de dos décimas- desde el año 1996, como consecuencia del nuevo sistema de cálculo aplicado en toda la UE.

La causa de esa tendencia a la baja está en el sector exterior, consecuencia de la crisis financiera internacional de la segunda parte del pasado año. La mayoría de los expertos considera ahora que lo peor de esa crisis ha podido pasar. De confirmarse esta apreciación, la economía española podría cerrar el ejercicio al menos en el 3,5% esperado por el Gobierno. Para ello, la aportación negativa del sector exterior tendría que reducirse al 1,7% previsto.

El crecimiento del 3,5% esperado sería inferior al 4% de media en 1998, y al 3,7% de un año antes, pero permitiría a la economía española mantener un elevado diferencial de crecimiento con los países del euro. Este margen es ahora favorable a España por dos puntos, según las estimaciones recientes de Eurostat.

Fuerte demanda

Otro dato que muestra la potencia del crecimiento español es la comparación entre varios trimestres seguidos; es decir, entre un trimestre y el precedente. El ritmo se mantiene constante en el 1,6% desde el primer trimestre de 1998, y supera por una o dos décimas los registros del año 1997. El factor que impulsa el crecimiento de la economía española es la demanda interna, que creció un 5,5% en el primer trimestre del año respecto del mismo periodo del año anterior y un 7,1% en relación al último trimestre de 1998. La variación de los últimos 12 meses ha sido una décima superior a la del último trimestre de 1998, y supera medio punto la previsión del Gobierno para todo el año.

Dentro de la demanda interna se ha acelerado la inversión (un 11,7% en el último año, frente al 10,9% del último trimestre de 1998), y en especial, la destinada a construcción (un 10,4% frente al 9,2%). El consumo total ha bajado del 3,7% al 3,6% a causa del comportamiento de las instituciones sin fines de lucro y las administraciones públicas, ya que el consumo en los hogares ha pasado del 4,2% al 4,3%.

El 3,6% de crecimiento registrado en la economía no se ha reflejado totalmente en el empleo en términos de contabilidad nacional, cuyo incremento ha sido del 3,3% frente al 3,7% del último trimestre. Pese a ello, la remuneración total de los asalariados ha aumentado un 8,4%, cuatro décimas más, frente al 3,2% de los beneficios y otras rentas, que siguen la tendencia a la desaceleración iniciada en 1997.