Más de 200 chabolistas serán realojados en distintos barrios de Málaga para evitar guetos

Los chabolistas del Puente de los Morenos y de la Misericordia tienen más claro su futuro. Tras la reunión que mantuvieron sus representantes con los responsables del Ayuntamiento de Málaga y de la Junta, llegaron a un acuerdo por el que se les darán viviendas sociales, ya en construcción, en varios barrios de la ciudad. Así se evitará la reproducción de guetos y se dará respuesta a la fuerte oposición vecinal que ha impedido que los chabolistas sean realojados en Los Prados.

María Victoria Romero, concejala de Bienestar Social del Ayuntamiento de Málaga, declaró ayer que no podía dar una fecha exacta, pero que sin duda todos los chabolistas estarían convenientemente realojados antes de dos años. Entretanto, señaló, se estudiará la viabilidad de crear un centro de estancia transitoria. El texto del acuerdo establece que se formará un grupo de trabajo constituido por técnicos del Ayuntamiento y de la Junta y por representantes de los chabolistas y de las ONG que trabajan con ellos. Este grupo, cuya función será supervisar que estas familias se integren en viviendas "normalizadas" y controlar los gastos, se reunirá semanalmente hasta que finalice el proceso. El documento determina también que este plan afectará sólo a las familias que figuren en el censo que se realizó en los dos asentamientos de chabolas el pasado 12 de mayo. A medida que los habitantes del Puente de los Morenos y la Playa de la Misericordia vayan siendo reubicados, sus antiguas casas serán derribadas, para evitar que vuelvan a ser ocupadas, como ocurrió en otras ocasiones. Romero aseguró que se entrevistará a cada familia antes de asignarle la nueva vivienda y que se tendrá muy en cuenta su parecer. En el acuerdo se especifica que también se contará con la asesoría de las ONG más implicadas en la ayuda diaria a los chabolistas. Según este documento, nadie saldrá perjudicado. La Junta se ha comprometido a compensar al ayuntamiento por el número de viviendas que vayan adjudicándose a los pobladores de los dos asentamientos, de modo que no disminuya el número de casas inicialmente previstas en cada promoción. Romero concluyó que en la reunión, "muy fructífera", la prioridad absoluta fue la integración, y destacó que se consiguió consenso entre todas las partes.