El Parlamento Europeo

Destacados analistas de la UE aseguran que la nueva Eurocámara, con mayoría de centro-derecha, compensará el dominio socialista del Consejo de los Quince. Según dicen, este equilibrio de fuerzas ideológicas será efectivo gracias a los mayores poderes controladores y legislativos otorgados al PE, reduciendo el déficit democrático de la UE. No comparto esta visión optimista sobre el futuro político de la UE. No veo cómo el reforzado Parlamento Europeo puede potenciar la capacidad de Europa si permanece circunscrito básicamente a partidos políticos nacionales. Los eurodiputados no van a Europa con la pretensión de legislar en pro del bienestar común de los europeos, sino con la prioridad de defender a su nación contra las demás. De hecho, ya lo ha anunciado descaradamente Loyola de Palacio: "Siempre antepondré los intereses de España sobre los de Europa".

Este desmedido predomino del interés nacional por encima de la ideología política no hace más que estancar el proceso de construcción europea, tal y como sucedió el pasado mes de marzo, cuando el PE provocó la dimisión en pleno de la Comisión Santer, tras las acusaciones de fraude y mala gestión. En realidad, las verdaderas razones de esta desproporcionada operación de acoso y derribo fueron otras no confesadas: a las naciones, especialmente las ricas como Alemania, les convenía desacreditar a Bruselas para así justificar una menor aportación al presupuesto comunitario, tapando de paso el debate sobre la corrupción tanto de la Eurocámara como de los Estados miembros.

¿Es legítimo este egoísmo nacional, poco o nada europeísta, en el seno del Parlamento Europeo? ¿Debe la Eurocámara transferir aún más espacio político hacia los Estados, cuando los intereses nacionales ya están de sobra salvaguardados en el omnipresente Consejo de los Quince? ¿Dónde se deliberarán las cuestiones ideológicas eminentemente europeas? En resumen, ¿cómo podemos los 300 millones de euroelectores mejorar la evidente invalidez política de la UE si su propio Parlamento no es más que otro reducto nacionalista cada vez más fortalecido?-