Perplejidad de los vecinos
A los vecinos de la familia Flos-Árán no les convence la hipótesis de que Manuel Flos asesinara a su esposa, María Teresa, y a su hijo Joel y luego se quitara la vida de un disparo. El padre de familia estuvo un tiempo en la cárcel hace algunos años por un delito de falsificación de moneda, pero no había vuelto a tener problemas con la justicia y sus relaciones con su esposa -que trabajaba ocasionalmente como camarera- eran buenas, a decir de un amigo y vecino. A pesar de que Manuel ya no trabajaba como guarda forestal tras sufrir un accidente en el que le cayó encima una avioneta, la familia Flos-Arán tampoco pasaba estrecheces económicas, ya que recientemente habían recibido una herencia. Sin embargo algunas fuentes sí señalan que Manuel era una persona emocionalmente inestable.
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