¿Nóminas sin pagar?
Los responsables de los servicios informáticos de las universidades están de acuerdo en que el efecto 2000 no supone un peligro serio para sus sistemas. También afirman que no han invertido grandes cantidades de dinero ni de tiempo en la adecuación de sus programas. De hecho, la mayoría considera que se han exagerado los problemas que se podrían derivar. "El efecto 2000 es, en gran medida, una estrategia comercial de las casas de software para crear alarma sobre algo que existe, pero que no es tan grave, y así vender productos de actualización", opina Miguel Delgado, vicerrector de Servicios a la Comunidad de la Universidad de Granada. Sin embargo, todas han preferido curarse en salud y afrontar la reforma para evitar el caos que supondría que el 1 de enero del 2000 sus ordenadores sólo tuvieran dos dígitos para marcar el año. En tal caso, el reloj del PC pasaría del año 99, no al 100, sino al 00 con el consiguiente desorden en los expedientes académicos: para el ordenador un alumno que comenzara sus estudios en el curso 98/99 los acabaría en el 01/02, es decir en el 1901/1902. La computadora también se volvería loca para buscar las notas obtenidas por un estudiante en el curso anterior para concederle una beca. En el año 2000, el 00 para ella, no rastrearía las calificaciones del 99, sino las del menos 01, con el consiguiente error de sistema. Y el alumno se quedaría sin beca. Igual que los funcionarios sin nómina: ¿Cómo se le explica a un ordenador en enero del 2000 que pague la nómina de diciembre de 1999 si para él faltan 99 años para que llegue ese mes?
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