Matanza en Colorado

Así que en Estados Unidos "se recolecta lo que se siembra", según el señor Aceves (Cartas al Director, 28 abril 1999). ¿Es que usted quiere que nos quedemos con esta conclusión después de la matanza en Colorado? Puesto que estoy acostumbrada a (y a veces estoy de acuerdo con) cartas críticas hacia EEUU, apenas habría hecho caso a ésta. Pero yo soy de Colorado, me crié en Littleton, pasé cuatro años de mi vida en el instituto de Columbine, donde el asunto tuvo lugar. Como usted, señor Aceves, yo y mi familia y los vecinos de Littleton nos preguntamos "qué clase de odios pudieron anidar en la mente" de los dos jóvenes. Pero usted escribe que una matanza de 12 niños y un profesor, y el suicidio de dos niños más, es de esperar de mi país, de mi ciudad, de mi instituto.Desde luego, hemos oído bastantes teorías, algunas muy malas, del asunto, tanto del tipo psicológico como sociológico, tanto político como religioso. Esto sí es de esperar; es de suponer que los medios de comunicación van a ofrecernos cualquier tipo de análisis, y que la mayoría de ellos estarán muy mal informados y serán superficiales. Visto lo que decían los presentadores de televisión españoles la semana pasada (estaba en Oviedo cuando me enteré de la tragedia), no nos han desilusionado. Tal vez se puede decir que soy cínica. Pero no he llegado a ser tan cínica, y hasta intolerante, como usted. Yo nunca empezaría una carta con un llanto de lo incomprensible que fue la matanza para pasar luego a una denuncia de toda la sociedad americana, hasta la destrucción total por una gente que, según usted, carece de valores sociales y sufre de la idolización del dólar.

Sin embargo, a usted se le escapa el asunto. Fue una tragedia que ha conmovido a todo el país, no sólo a nosotros, que estamos más cercanos a ella. Su carta nos hace daño a nosotros, que esperamos seguir adelante y hacer que las heridas se curen. La intolerancia de usted hacia EEUU, que, por supuesto, no es un país perfecto, y hacia los ciudadanos de Littleton me decepciona casi tanto como la matanza misma.- . (Bélgica).