Rugova explica que fue forzado a entrevistarse con Milosevic
El líder moderado de los albaneses de Kosovo, Ibrahim Rugova, fue obligado a acudir a una reunión con el presidente de Yugoslavia, Slobodan Milosevic, que fue presentada por la televisión serbia como una prueba de la voluntad negociadora del régimen de Belgrado. Más tarde se vio obligado a acoger en su domicilio al embajador ruso en Yugoslavia. Milosevic juega "al gato y al ratón" con Rugova, según se queja el propio dirigente albanés, con el propósito de hacerle pasar por un traidor.El semanario alemán Der Spiegel que será puesto en venta mañana revela que Rugova confesó a una periodista, Renate Flottau, que pasó seis días en su casa de Pristina, que estaba sometido a un arresto domiciliario y que las autoridades serbias habían rechazado su petición para viajar fuera de Yugoslavia con su familia.
Ante su insistencia para desplazarse a Skopje (Macedonia), el viceprimer ministro yugoslavo, Nikola Sainovic, declaró a Rugova que era "un hombre libre que podía viajar", pero le advirtió de que en su camino corría el riesgo de "encontrarse a serbios furiosos que podrían organizar cualquier incidente".
Flottau, según el semanario alemán, fue sometida en Pristina a "dos brutales interrogatorios por parte de oficiales serbios de seguridad" antes de ser autorizada a regresar a Belgrado.
Tras revisar las imágenes de Rugova con Milosevic, la OTAN había considerado que se trataba de un documento de hace dos años que la televisión serbia había vuelto a emitir con fines propagandísticos.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.