El presidente de Níger es asesinado por su guardia personal durante un golpe de Estado

El presidente de Níger, Ibrahim Baré Mainasara, fue asesinado ayer en el transcurso de un intento de golpe de Estado perpetrado tras las protestas suscitadas por la anulación de unas elecciones municipales. Unidades militares ocuparon las calles de la capital, Niamey, y cortaron toda comunicación con el exterior a primera hora de la mañana. Horas después se conoció la noticia de que el presidente había sido asesinado, posiblemente a manos de su propia guardia personal, en una base militar al sur del país. Al parecer, Mainasara fue asesinado cuando trataba de huir.

El primer ministro de Níger, Ibrahim Assane Mayaki, confirmó la muerte del mandatario aunque señaló que ésta había sido fruto de un "desgraciado accidente". Mayaki, que parece haber quedado al frente del país, declaró anoche un mes de luto nacional y el cierre de las fronteras terrestres. Níger quedó sumido en un total silencio informativo. Todas las comunicaciones con el exterior fueron cortadas, las emisoras de radio dejaron de emitir, el aeropuerto de Niamey fue cerrado y los vuelos que se dirigían hacia Níger, desviados a otros destinos.Informaciones captadas en Senegal señalaban que tropas rebeldes habían tomado el palacio presidencial y las sedes de los ministerios de Interior y Defensa. Inmediatamente tropas opuestas al golpe rodearon estos edificios con carros de combate y soldados de infantería.

El Gobierno había lanzado por la mañana un llamamiento a la calma después de que la oposición convocara a la ciudadanía a protestar contra la anulación de las elecciones locales celebradas el pasado 7 de febrero. Dichas elecciones debían ser, en teoría, el primer paso para un retorno del país al sistema democrático.

Condena de la ONU

En la tarde de ayer el secretario general de la ONU, Kofi Annan, repudió el asesinato del presidente y pidió a los habitantes de Níger que eviten los enfrentamientos violentos y respeten el orden constitucional.Mainasara llegó al poder a través de un golpe de Estado en enero de 1996. General del Ejército, había justificado el golpe diciendo que las diferencias entre el entonces presidente, Mahamane Usmane, y su primer ministro estaban paralizando la vida del país.

Meses después del golpe, Mainasara fue elegido presidente de Níger en un plebiscito contestado duramente por la oposición, que decidió boicotear las elecciones legislativas celebradas en 1996.

La situación se desbloqueó a finales del año pasado, y el pasado febrero se celebraron elecciones municipales. Sin embargo, el Tribunal Constitucional anuló los resultados en casi la mitad de las circunscripciones dados los numerosos incidentes que se habían producido durante la jornada electoral por parte de hombres armados y militares. La anulación sembró la ira entre la oposición.

Níger es una antigua colonia francesa que alcanzó la independencia en 1960. Está catalogada por Naciones Unidas entre las naciones más pobres del planeta. Más del 60% de su población vive por debajo del umbral de pobreza.