La UE apoya finalmente los bombardeos de la OTAN

Belgrado no ha logrado dividirles. Pese al amago de desafección de Grecia, las críticas de Italia y las pejiguerías de los neutralistas (Irlanda, Austria, Suecia y Finlandia) por una palabra, los Quince lograron firmar ayer una unánime declaración que avala políticamente las acciones militares de la Alianza Atlántica y resulta durísima con el régimen de Slobodan Milosevic. Contra lo que muchos temían, las fisuras no se convirtieron en fractura, con lo que "ha prevalecido la unidad y la política de firmeza", como bien resumió el español Abel Matutes. El ministro griego, Giorgios Papandreu, quien primero se negó a suscribir el texto, recapacitó en el último momento.Aunque con retraso y pocas novedades, la UE escribió una declaración muy completa, que absorbe anteriores tomas de postura parciales de otras organizaciones, países y grupos de Estados. Así, respalda a la OTAN, pues "frente a las políticas criminalmente irresponsables y las repetidas violaciones de las resoluciones de la ONU, el uso de las más severas medidas, incluida la acción militar, ha sido necesario y fundado". Los neutralistas lograron colocar ese último adjetivo, más descafeinado que el original "justificado", y desplazar la mención a la OTAN a la frase siguiente, más enunciativa.

También se comprometen a esforzarse para que los "personalmente responsables" de la "brutal campaña de deportación forzada, torturas y asesinatos" sean llevados al Tribunal de la Haya, como propuso Washington, aunque los Quince no especifican apellidos, pues el italiano Romano Prodi recordó que quizá sea Milosevic quien actúe de interlocutor para la paz final. También reiteran al dictador las cinco condiciones (alto el fuego, presencia militar internacional pacífica en Kosovo...) que debe cumplir, como establecieron los miembros occidentales del Grupo de Contacto.