Tocino asegura que el convenio del canal Segarra-Garrigues no se firmará este año

La ministra de Medio Ambiente, Isabel Tocino, reiteró ayer en Mollerussa (Pla d"Urgell) que este año no se firmará ningún convenio con la Generalitat para financiar las obras del canal Segarra-Garrigues y que ello no se deberá a una falta de voluntad política de las dos administraciones implicadas, sino a problemas de presupuesto. El Segarra-Garrigues es una infraestructura hidráulica que tendrá más de 100 kilómetros de longitud y regará 91.000 hectáreas de seis comarcas del sur de la provincia de Lleida.

Se trata de un proyecto tan ambicioso como polémico que lleva 20 años arrastrándose por los despachos de diferentes administraciones y que los políticos resucitan periódicamente para utilizarlo como arma electoral. Hace cuatro años el Gobierno central declaró la obra de interés general. La ministra aseguró ayer que difícilmente se podrá iniciar antes del año 2000. "En este momento", precisó Tocino, "no creo que las cosas puedan estar maduras durante 1999, porque cuando se negociaron los presupuestos y se asignó esa partida no se habló de firmar ningún convenio este año entre la Generalitat y el Ministerio de Medio Ambiente. Lamento que haya gente que quede defraudada, pero yo no tengo la culpa de que alguien haya creado falsas expectativas. Es mejor decir que el convenio no está maduro que prometer y luego defraudar." La ministra dijo que un proyecto que implica una inversión de 164.000 millones de pesetas ha de seguir un proceso muy complejo, ya que tiene que ser aprobado por los ministerios de Agricultura y de Economía y Hacienda, y por ello el convenio para financiar la obra no podrá estar listo este año. "La parte que le corresponde al Gobierno son 54.000 millones y no hay ministerio ni nadie que pueda asumir unilateralmente esa cantidad", señaló. Los 110.000 millones restantes los tiene que aportar la Generalitat. La visita de Isabel Tocino a Mollerussa, donde visitó la 127ª edición de la Fira de Sant Josep, despertó expectación en la zona, donde 20.000 regantes llevan más de 10 años esperando una decisión política que acabe con la incertidumbre que rodea el inicio de las obras. La historia del canal se ha convertido en un juego de despropósitos. Hace un mes, los consejeros de Obras Públicas y de Agricultura, Pere Macias y Francesc Xavier Marimon, anunciaron la existencia de un acuerdo para su financiación y se refirieron a la feria de Mollerussa como lugar idóneo para firmar el convenio aprovechando la presencia de la ministra. Por otra parte, ayer, Isabel Tocino inauguró en Barcelona la II Feria Ecologismo y Medio Ambiente. La ministra aseguró que apoyará las decisiones que adopte la Generalitat sobre restricciones de agua porque "no puede ser que España sea el país más seco y que, en cambio, sea el máximo consumidor de agua por habitante de la Unión Europea". Tocino destacó que, antes de recurrir a los trasvases, las preferencias del Gobierno en política de aguas son el uso eficiente y el tratamiento de aguas residuales, salinas y subterráneas. Tocino subrayó la necesidad de modernizar los regadíos y la responsabilidad de los regantes en el control del consumo de agua.