Clinton promete presionar al Congreso para obtener ventajas para Centroamérica

ENVIADO ESPECIALEl padre del guatemalteco Pablo Carpio fue secuestrado por la guerrilla, su hermano recibió tal paliza que quedó baldado en un barranco durante dos días. Él emigró a EEUU y fue repatriado de las orejas. "Clinton sólo vino a pasear", desdeña. América Central padeció cruentamente en los ochenta, alcanzó la paz en los noventa y, abrazada ahora al libre mercado, reclamó de EEUU la generosidad demostrada por sus Gobiernos en el combate contra el marxismo. El Salvador recibió entonces 6.000 millones de dólares (900.000 millones de pesetas).

Bill Clinton, concluyó ayer una gira de cuatro días por los países asolados por el huracán Mitch, y, en una reunión cumbre con presidentes centroamericanos, desarrollada en la colonial Antigua, prometió defender en el Congreso de EEUU una ampliación regional de los beneficios y preferencias arancelarias concedidos a México en el Tratado de Libre Comercio (TLC), ayudas en el pago de la deuda externa, y mayor tolerancia en el programa de deportación de indocumentados. "Estoy comprometido con el libre mercado y comercio, y con las leyes de inmigración justas, sin importar la procedencia de las personas afectadas", declaró antes de suscribir una declaración sobre cooperación y asistencia observada con escepticismo porque enumera políticas cuyo cumplimiento nadie asegura.

El origen de las calamidades centroamericanas es diversa, con culpas compartidas, pero las principales fueron atribuidas por la izquierda al intervencionismo de Washington, y a las oligarquías nacionales, en tanto que estudiantes guatemaltecos quemaban banderas norteamericanas y exigían la publicación por Washington de datos sobre los asesinatos y desapariciones del último cuarto de siglo.

Los altos índices de pobreza, desnutrición y analfabetismo, las diarias penurias y la corrupción no han sido reducidos por las democracias jóvenes y avances macroeconómicos de las economías regionales, malogrados en Honduras y Nicaragua con el huracán.

[En EEUU, mientras tanto, la cadena de televisión Fox informó ayer de que Hillary Clinton no ha viajado con su marido a Centroamérica a causa de sus dolores de espalda, como dijo la Casa Blanca, sino porque se niega a compartir habitación y cama con él, informe Europa Press. Un amigo de la pareja aseguró: "No tienen nada que decirse, lo único que les queda en común es su hija Chelsea"].