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El Times de Londres ha publicado una noticia que seguramente era desconocida por la gran mayoría de los británicos, y otro tanto puede decirse de los españoles.Entre 1966 y 1973, Gran Bretaña expulsó, manu militari, a la totalidad de los habitantes del archipiélago Diego García, pose

sión británica en el océano Índico, trasladándolos a la isla Mauricio, unos 2.000 kilómetros más lejos. La idea era arrendar Diego García, "limpia de polvo y paja", a Estados Unidos para instalar allí una base naval de gran importancia estratégica. Los isleños, que tienen prohibido el regreso a su país natal, no han llegado a adaptarse a Mauricio, y son frecuentes el suicidio y las depresiones entre ellos. La asociación de isleños ha pedido ahora al Tribunal Supremo británico que declare ilegal su expulsión, así como la prohibición de volver a su país, con todas las consecuencias jurídicas consiguientes.Gran Bretaña, madre colonial amantísima, se niega a negociar la soberanía de Gibraltar por creerse en la obligación de defender los deseos de los gibraltareños. No comment.-