Echanove invita a soñar con García Lorca en su interpretación del poeta

El actor Juan Echanove es desde hace un año Federico García Lorca. Entre ensayos y una larguísima gira con la obra Como canta una ciudad de noviembre a noviembre no ha interpretado a otro personaje que no sea un Lorca ante el piano, intentando transmitir al público el sonido y el ambiente de la Granada en que vivió. Su trabajo le ha hecho merecedor del Premio Ercilla a la mejor interpretación teatral. Echanove, dirigido por Lluis Pasqual, invita en la representación a "soñar con Lorca".

La visita de Echanove a Bilbao tenía ayer un doble objetivo. Por la mañana, presentó Como canta una ciudad de noviembre a noviembre, una obra catalogada como conferencia que García Lorca ofreció por vez primera en Madrid en 1933, y que el actor pondrá en escena en el Teatro Arriaga del 11 al 14 de marzo. Por la noche el actor recogió el Premio Ercilla a la mejor interpretación de la temporada teatral de 1998 por su trabajo en esa obra. Echanove reconoce que la obra le "atrapó" y aunque tras el estreno en Barcelona el pasado 15 de mayo sólo estaba previsto representarla en media docena de ciudades españolas, la gira ha ido creciendo y creciendo desde entonces en una gira ininterrumpida que le ha permitido llegar a las 180 representaciones y superará las 220 antes de cumplir su primer año en cartel. "De todos los Lorcas posibles, desde el Lorca de raza, al más avanzado o al más sentimental, el más familiar, cotidiano y normal es el de Como canta una ciudad...", dice. La obra es la puesta en escena de una conferencia en la que daba a conocer Granada a través de su música. Incluye 13 canciones, rescatadas por Lorca del cancionero popular, como Los cuatro muleros o El café de chinitas, que hablan de como cambia la ciudad a lo largo del año, de estación en estación."Las canciones son la columna vertebral del espectáculo", asegura Echanove. "La poesía adquiere un nivel tan liviano y sensible que se convierte en música". El actor remarca que la obra ha sido tan bien recibida por el público de Granada como de Amorebieta. En su opinión las razones de esta respuesta radica en que "el cancionero popular resuena en el alma de los espectadores" y en que "la música y la poesía son patrimonio de todos". Echanove habla del teatro y la poesía de Lorca con admiración. Antes de empezar a pergeñar el proyecto de Como canta una ciudad, en dos ocasiones -El público y Comedia sin título- había interpretado textos de Lorca, y siempre bajo la dirección de Lluis Pasqual. El tratamiento de Pasqual El actor se entusiasma con la figura de Lorca y el tratamiento que Pasqual ha dado al espectáculo. "Sólo a un loco como Pasqual se le pudo ocurrir este montaje, creado para proponer a los espectadores soñar con García Lorca, no reproducir a García Lorca". La escenografía que el director propuso, señala Echanove, es una síntesis total de los conceptos que manejó Lorca en el teatro. El actor recuerda que Pasqual intentó reproducir "la noche amarilla", de la que hablaba Lorca con metáforas de dificil concreción. Pasqual lo resolvió con una propuesta en la que "la luz parte de dentro y se dirige hacia el espectador". La gira de Como canta una ciudad ... finalizará en julio en Barcelona, en el Teatre Lliure, igual que empezó en el mes de mayo.