El comité de Babcock Wilcox acusa a Piqué de poner en peligro el futuro de la empresa

El comité de empresa de Babcock Wilcox acusó ayer al ministro de Industria, Josep Piqué, de poner en riesgo el futuro de los 1.200 trabajadores de la empresa de bienes de equipo e, indirectamente, de toda la Margen Izquierda. En nombre del comité, José Luis Ruiz, de UGT, criticó duramente unas recientes declaraciones de Piqué en las que planteaba la privatización o el cierre como únicas posibilidades de futuro de Babcock Wilcox, unas afirmaciones, que, según destacó, han perjudicado la ya "delicada" situación de la empresa. "Somos las víctimas de una crisis que no hemos generado y que estamos tratando de solucionar", aseguró el portavoz del comité, quien destacó el "sacrificio" de los trabajadores que han aceptado la congelación salarial desde 1997 para apoyar un proyecto de viabilidad. Todos los sindicatos presentes en Babcock Wilcox (UGT, Comisiones, ELA, LAB y ESK) mantienen una postura común desde que la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi) comenzó el proceso de privatización de la empresa vizcaína. Ante el "futuro incierto" de la fabricante de bienes de equipo, los representantes de los trabajadores iniciarán una ronda de contactos con todos los partidos políticos y con los alcaldes de la Margen Izquierda para recabar apoyos que garanticen la viabilidad de la empresa. Las centrales volvieron a reclamar su intervención en el proceso de privatización y pidieron al ministro Piqué información sobre el proceso. Los delegados sindicales aseguran desconocer las propuestas de las empresas que optan a la privatización y que son Duro Felguera, Mc Dermott y Steinmuller. Junto a éstas, concurre también la multinacional noruega Kvaerner, pese a que su delicada situación financiera llevó al Ministerio de Industria a reabrir el proceso de privatización a otras ofertas.