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Una empresa del concejal de Obras vende a tres firmas que sirven al Ayuntamiento

El concejal de Obras, Enrique Villoria, del PP, y el gerente de la empresa municipal Campo de las Naciones, Pablo Población, crearon en 1994 una sociedad privada, Denver Europa, cuyo objeto social es el "asesoramiento jurídico, fiscal, contable e inmobiliario; la compraventa y alquiler de inmuebles; la distribución de alimentos y la realización de estudios de mercado de productos de alimentación", según consta en el Registro Mercantil de Madrid.Villoria, que además de concejal de Obras es presidente de la empresa municipal Campo de las Naciones, y Población, su gerente en dicha sociedad, han desarrollado con éxito el punto referido a la distribución de alimentos. Venden a la mayoría de las grandes superficies, incluido El Corte Inglés, Continente, Caprabo, Alcampo... Facturan más de 200 millones de pesetas anuales, según detalló a este periódico el tercer socio de la empresa, Rafael Pérez.

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Villoria: "No vi nada incompatible en el negocio"

Las conexiones privadas de Denver han tenido, en ocasiones, una repercusión en el ámbito público. Denver trabaja para, al menos, tres empresas que han sido contratistas de la sociedad municipal Campo de las Naciones, que preside Villoria y dirige Población.

Es el caso de la fábrica de caramelos burgalesa Pinedo, que vendió en mayo de 1998 su producto a Campo de las Naciones. Desde enero de ese año, caramelos Pinedo tenía a Denver como representante, según el director comercial de la empresa de golosinas, Amalio García. Cafeterías Mallorca, adjudicataria por concurso de la hostelería del Palacio de Congresos del Campo de las Naciones desde 1993 también tiene a Denver entre sus proveedores, según fuentes de dicha empresa y el tercer socio de Denver, Rafael Pérez. Asimismo, los supermercados Sánchez Romero, que venden cestas de Navidad a Campo de las Naciones, compran productos a Denver, según reconoce Población.

Enrique Villoria, que lleva 10 años al frente del área municipal de Obras y más de veinte en el Ayuntamiento, no ve ninguna incompatibilidad entre su cargo público y su negocio privado, y asegura que, en todo caso, las ganancias de Denver por su relación con contratistas del Campo de las Naciones significan un mínimo importe. "Cuando tienes 3.000 clientes, siempre te acabas encontrando con alguno relacionado con el Ayuntamiento", alega su socio Población para explicar esa colusión entre su actividad política y su empeño empresarial. "Pero nunca he usado mi cargo. No hemos presionado a ningún almacén o restaurante", añade Población. PASA A LA PÁGINA 3

Un socio asegura que la empresa de Villoria vendió directamente al Campo de las Naciones

VIENE DE LA PÁGINA 1A pesar del importe mínimo de las ventas a contratistas municipales, los socios de Denver Europa, Población, Villoria y Rafael Pérez no se ponen de acuerdo sobre alguna de estas operaciones. Hay un punto común. En los primeros meses de 1998, la sociedad Campo de las Naciones compró 1.000 kilos de caramelos de la marca Pinedo, de Burgos, con el fin de ofrecerlos bajo un envoltorio publicitario de dicha sociedad municipal. No hubo concurso ni contrato. Hasta aquí, todos de acuerdo. La incógnita es si Pinedo vendió directamente o lo hizo a través de quien ya era su distribudor, Denver Europa.

"Fue una venta directa de Denver Europa a Campo de las Naciones, sin más, con un albaran y todo", explica uno de sus socios, Rafael Pérez. Villoria y Población lo niegan y aseguran que quien vendió fue Caramelos Pinedo. Amalio García, director comercial de esta firma, corrobora la versión de Villoria y Población sobre la venta de su producto en 1998 a Campo de las Naciones. Y añade datos esclarecedores sobre este triángulo empresarial: "Vendimos y cobramos directamente a Campo de las Naciones. Eran 1.000 kilos de caramelos personalizados . Supuso más de medio millón de pesetas. Denver Europa, que era nuestro distribuidor desde enero de 1998, no intervino en esta operación, que se realizó en mayo de 1998". El directivo explica de modo diáfano por qué contrataron a Denver (sociedad madrileña) desde Burgos: "Porque don Pablo nos lo pidió, ya que tenía conocimento de nosotros de antes". El tercer socio de Denver da una explicación distinta sobre quién hizo el negocio de los caramelos: "Una agencia de publicidad que no recuerdo nos dijo a nosotros, Denver, que nos pusiéramos en contacto con el Campo de las Naciones para venderles los caramelos publicitarios. Y así fue. Aquí está el albarán, que si Población lo autoriza, se puede enseñar. Les vendimos 500 kilos, a unas 300 pesetas, de la marca Pinedo. No hubo contrato ni concurso. No recuerdo con quién contacté en Campo de las Naciones". Hasta tres veces repite Pérez tal versión, ante su director gerente, Roberto Cuadrado, que recuerda su escaso monto.

"Es mentira"

Tal relato saca de sus casillas a Población: "Es mentira. No compramos nada a Denver. No soy un gilipollas para cometer un error así". Tras hacerle ver que tal versión la sustentan su socio y director gerente, estalla: "Pues si esos dos han dicho eso, se van a la mierda esta tarde". Población asegura que no recuerda desde qué mes de 1998 distribuyen los caramelos Pinedo y que no existe ningún contrato. "Fue un acuerdo verbal", dice. "Empezamos a representarlos después de esa operación", esgrime.

Pinedo no es la única firma que contrata con la sociedad municipal de Campo de las Naciones, cuyo presidente es Villoria y cuyo gerente es Población, que tiene a Denver Europa como proveedor de artículos alimenticios. Desde 1993, una cafetería del grupo Mallorca es la adjudicataria del servicio de hostelería en el Palacio de Congresos, la joya del Campo de las Naciones. Es un hecho público, y aprobado por la oposición. No es tan conocido que la empresa privada de Villoria y Población vende productos a la central de compras de dicha cadena hostelera. Esto lo confirman tanto Pérez como la propia empresa Mallorca.

Existe un tercera empresa que conecta a Denver con Campo de las Naciones. Se trata de los supermercados Sánchez Romero. Lo explica Población: "Sánchez Romero nos vendió cestas de Navidad para los empleados de Campo de las Naciones". Casualmente, esta firma compra productos de Denver Europa, según confirman en dicha empresa y admiten Pérez y Población. "Las cestas no las encargué yo, fue una cosa de administración", alega el gerente de Campo de las Naciones". Denver Europa, amén de proveer a la casi totalidad de las grandes superficies de Madrid, surte al economato del Banco de España y pujó sin éxito por vender bebidas y conservas al Ejército de Tierra.

Denver Europa nació el 24 de mayo de 1994, cuando Villoria y Población ya regían el Campo de las Naciones. Población explica así la gestación de esta empresa: "Pérez había tenido subvenciones y tenía problemas para crear esta empresa y nos pidió ayuda". Pérez, en su versión, no cita tal apuro empresarial, sino que, según cuenta, conocía a Villoria de venderle vinos en 1986 a través de una tienda que tenía, y asegura que Población le fue presentado por el propio concejal. "Esto de la distribución de alimentos son cosas que le gustan a Villoria", corrobora Población, quien se irrita ante el hecho de tener que detallar su función en Denver. "¿Y por qué tengo que explicarlo? Lo público entiendo que debo informarlo, pero lo privado no".

Distribución de alimentos

Lo privado es una distribuidora de alimentos ubicada en una nave de San Fernando de Henares sin rótulo en la puerta, con un director gerente en un modesto despacho que maneja un ordenador portátil; con una plantilla de doce personas. El peor año de facturación rondó los 80 millones y ya supera los 200 millones de pesetas, según datos de Pérez. "Acabo de firmar un contrato para distribuir aceites Coosur", se jacta Población. "Tengo tan poco tiempo que me tengo que traer aquí los contratos. Esta firma distribuye productos como caramelos de Pinedo (Burgos), caviar o sucedáneos, vinos de Castilla-La Mancha señorío de Guadianeja, de la firma Vinícola de Castilla, bacalao, anchoas, conservas animales, entre otros. Los clientes son muy importantes: Corte Inglés, Continente, Simago, Alcampo, Makro, Caprabo, Sánchez Romero y cafeterías Mallorca.

El director de Denver, Roberto Cuadrado, defiende su profesionalidad: "Todos los clientes los hemos conseguido nosotros.Enrique y Pablo no intervienen en la captación de clientes. No llevo la tarjeta de nadie por delante. No me interesa que se sepa que detrás tengo políticos porque a los clientes no les gusta".

Mientras Población asegura que todas las facturas de Campo de las Naciones están intervenidas y, por lo tanto, su gestión empresarial es transparente, un edil socialista del consejo de administración de dicha empresa esgrime que para estos contratos de bajo monto el gerente tiene facultad para realizarlos directamente y no son conocidos por el resto de los partidos. "Son asistencias técnicas y, entonces, nosotros, al no mediar concurso, no sabemos a quién se compra", explica el concejal.

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