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Sacerdotes de Vizcaya plantean pedir perdón a los presos de ETA

Sacerdotes y laicos pertenecientes a la Iglesia de Vizcaya han enviado a todas las parroquias de la provincia una serie de "textos para reflexionar" en los que se plantea pedir perdón a los presos de ETA por la "preocupación marginal" que existe actualmente sobre sus problemas y defienden que la tregua "requiere la presencia y el diálogo entre todos los partidos, también Euskal Herritarrok". Las misivas forman parte de las campañas diocesanas que todos los años celebra la Iglesia de Vizcaya con motivo de la Cuaresma. Un portavoz oficial del Obispado de Bilbao declinó ayer valorar su contenido y se remitió a la presentación pública de los textos que tendrá lugar la próxima semana. Únicamente insistió en que "no es documento del Obispado ni de la Iglesia sino materiales de trabajo de un equipo de la diócesis, que se envían para que los feligreses recen y reflexionen sobre ellos".Los textos, difundidos ayer por El Correo y enviados ya a 400 centros vizcaínos -entre parroquias y organismos e instituciones diocesanas- forman parte de la campaña Desarmar la palabra, que ha sido preparada por el Obispado de Bilbao para sensibilizar a sus feligreses sobre el diálogo y la reconciliación como medios idóneos para lograr la paz en Euskadi. Cuando finalice la reflexión entre los cristianos vizcaínos, se remitirá lo debatido al obispo Ricardo Blázquez, quien elaborará posteriormente un manifiesto en nombre de la Iglesia de Vizcaya.

"Gritos en las mazmorras"

En esos documentos se considera a los presos como "un mundo de excluidos y de dolor" y se plantea revisar la actitud mostrada hasta ahora por los cristianos. "La preocupación por ellos ha sido marginal" e incluso se ha desoído "el grito de dolor que estalla en las mazmorras". "No hemos sabido estar atentos a la interpelación de esa realidad; tendremos que pedir perdón". Los autores de los textos recuerdan que Jesucristo "fue encarcelado y torturado" y que es "un preso entre los presos, porque estos hombres y mujeres sufren la cárcel, sufren en su humanidad. "Todo hombre y toda mujer", prosiguen, "posee una dignidad que nadie tiene derecho a anular por ningún motivo".

En otro apartado abordan la situación de las víctimas del terrorismo y llaman al reconocimiento de su sufrimiento. "Una de las actitudes básicas que debemos desarrollar es tenerlas presentes, no dejarlas caer en el olvido y el abandono", por lo que sostienen que "no se puede construir un futuro en paz olvidando el sufrimiento de las víctimas".

Sobre el diálogo para desarrollar el proceso de paz, demandan que se lleve a cabo sin exclusiones. "La nueva situación requiere la presencia y el diálogo entre todos los partidos, también Euskal Herritarrok". Según las reflexiones enviadas a los feligreses vizcaínos, "el diálogo no debe pretender doblegar la voluntad del otro para después hablar".

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