Cuerda organiza un foro ciudadano para avanzar en la pacificación

El alcalde de Vitoria, José Ángel Cuerda, calificó ayer de "guerra civil larvada" la situación que vive en la actualidad Euskadi. Tan duro diagnóstico se vio completado con una propuesta personal para organizar un foro ciudadano bajo el titulo genérico La paz ahora-Bakea orain, que quiere reunir en siete sesiones antes de Semana Santa. El foro, que nace sin intención de perdurabilidad ni de competencia con ninguna otra iniciativa ya existente, quiere convertirse en lugar de encuentro, de diálogo y de impulso al proceso de pacificación, según dijo el alcalde en su presentación. La primera sesión tiene ya un objetivo ambicioso e improbable de lograr, si no median en estos siete días cambios sustanciales: sentar en torno a una mesa en el Palacio de Villa Suso, el próximo lunes, a todos los partidos políticos para que expongan en público sus posturas. Los encuentros serán abiertos y se celebrarán durante siete lunes consecutivos. Tras aspirar a reunir a los partidos políticos, en la jornada del 22 de febrero el tema será Paz, Justicia y Reconciliación, y prestará atención especial a las víctimas. El 1 de marzo serán los presos y la política penitenciaria los protagonistas, y el siguiente lunes se analizará los conceptos de nación, Estado, región y Unión Europea, con cuya luz se quieren alumbrar las ideas de paz y territorialidad. Los medios de comunicación y su papel en el proceso de paz se abordará en la jornada del 15 de marzo, y el papel de las confesiones religiosas, especialmente la Iglesia católica, la penúltima de las sesiones, el día 22. Los encuentros se cerrarán hablando de paz y cohesión social el último lunes de marzo, con la participación de los movimientos pacifistas y los distintos foros de opinión existentes. Debate sobre presos Una muestra de las distancias entre los partidos en materia de pacificación se pudo comprobar ayer en las Juntas Generales de Álava, donde los cuatro partidos firmantes de la Declaración de Lizarra (PNV, EA, IU y HB) presentaron una moción en la que se pide el acercamiento de presos vascos a Euskadi. La moción salió aprobada con un margen a favor de 26 votos frente a 22 en contra. En ella quedó manifiesta la unión en ese aspecto de los partidos de Lizarra, frente a las disensiones de las demás. fuerzas. PP, PSE y Unidad Alavesa no supieron aunar sus intenciones. Mientras el portavoz popular, Ramón Rabanera, se refirió a posturas del PNV de los años ochenta, los socialistas responsabilizaron del proceso de pacificación a los partidos gobernantes (PP en Madrid y PNV en Vitoria). Unidad Alavesa ni participó en el debate ni presentó un texto alternativo. Esa moción nacionalista fue la excusa utilizada por el PP para romper, a finales de diciembre, el pacto tácito de gobernabilidad que sostenía con el PNV y EA desde 1997. Rabanera confirmó ayer la ruptura, aunque en ningún momento del debate salió a relucir a esta cuestión.