La Fiscalía de Madrid acusa al Insalud de desatender a un niño 'ilegal' con cáncer

La Fiscalía de Madrid ha destapado un nuevo caso de supuesta desatención del Insalud a un niño, hijo de inmigrantes ilegales. En esta ocasión se trata un marroquí de seis años, enfermo de cáncer. El niño fue operado y sometido a quimioterapia en el hospital del Niño Jesús (Madrid). Una vez superado el tratamiento, la Administración del hospital exigió supuestamente a la madre, por carecer de cartilla, que pagase una resonancia magnética. La mujer firmó pero no pagó: desde entonces, asustada, dejó de llevar al pequeño al Insalud. La fiscalía, apoyada en un informe forense que corrobora el riesgo que corre el menor, ha requerido al centro para que de forma inmediatada atienda al crío. El hospital niega las imputaciones.

El pequeño, N. O. E., nacido el 13 de noviembre de 1993, mostró a los diez meses síntomas de padecer un extraño cáncer, un rabdomiosarcoma embrionario. Ante esta enfermedad, el hospital del Niño Jesús le atendió prestamente. Le extirpó el tumor, le trató con quimioterapia y le sometió a controles periódicos.A mediados de 1997, el niño pasó una revisión de rutina. Fue entonces cuando, siempre según el relato facilitado por la madre a la fiscalía, la Administración del hospital llamó a la mujer. Allí, en un despacho, una funcionaria comunicó que su hijo iba a ser sometido a una resonancia magnética y que tenía que pagar por ello unas 60.000 pesetas.

"Han cambiado las normas", explicó la funcionaria, al tiempo que pedía a la mujer que rubricase un compromiso de pago. La madre, sin recursos, firmó. La resonancia fue llevada a cabo, por derivación, en otro hospital, el San Rafael, un centro privado y concertado para estos servicios con el Niño Jesús. Obtenida la prueba, la madre fue a recogerla. Pero no se la dieron, porque no pagó, extremo que no confirmó el citado centro privado. Posteriormente, con todo, un médico, por teléfono, le hizo saber que el resultado había sido positivo. No acabó ahí el relato de la madre. Ante el cariz que había adquirido el asunto, la mujer había acudido al Insalud para conseguir una tarjeta sanitaria para su hijo. No se la dieron.

"Desde entonces, la mujer, asustada, ilegal, sin dinero ni tarjeta, no se atrevió a acudir al Insalud, temía que le quisieran cobrar la deuda y que la expulsaran por haber formado en falso", explicaron fuentes conocedoras de la declaración.

La semana pasada, la madre, tras año y medio sin recibir asistencia en el Insalud, se dirigió a la Fiscalía de Madrid. Allí contó su historia. Tras tomarle declaración, el ministerio público envió una reclamación previa al Insalud para exigirle que asistiese al niño. En un segundo paso, hizo revisar el caso del menor por un médico forense, quien dictaminó que era urgente que el pequeño fuese tratado inmediatamente, ya que su vida corría grave riesgo.

Apoyada en el escrito y en la declaración formal de la madre, la fiscalía mandó un requerimiento para que se atendiese al niño. "Es una situación límite y tengo cumplir mi obligación", afirmó ayer el fiscal jefe de Madrid, Mariano Fernández Bermejo. La dirección del hospital Niño Jesús, por su parte, salió ayer al paso de estas imputaciones: "Ni se le ha negado el tratamiento ni se le ha dicho que tenga que pagar nada", repetía una y otra vez el gerente, Jorge Gómez Zamora, quien culpó a la familia del menor de la falta de atención: "Fueron ellos los que no venían a las revisiones y los que desaparecieron en 1997", declró.

Defensa del hospital

Gómez Zamora insistió en que al crío se le atendió sin requerírsele documentación alguna. Y para demostrarlo explicó que el chaval estuvo ingresado en diez ocasiones (en total, 223 días). Además, de acuerdo con la versión del gerente, se ofreció a la familia del menor orientación social y educativa. ¿Y por qué la familia deja de acudir al seguimiento de una operación de cáncer y ahora recurre a la fiscalía alegando estar desatendidos por el hospital? "No lo entendemos", contestaron al unísono el gerente y la oncóloga Trinidad Contra Gómez.Ante la ausencia del crío en la revisión prevista en junio de 1997, los responsables del hospital insisten en que intentaron localizarle a través del teléfono. No obtuvieron respuesta. "Pensábamos que se habrían ido a su país o a otro centro", recuerda Contra. La madre del niño aseguró ayer en la Cadena Ser que había intentado ponerse en contacto con el hospital al menos unas horas antes.