Dura crítica de los arquitectos de Girona a una decisión de Nadal

La demarcación de Girona del Colegio de Arquitectos presentó ayer, casi al límite del plazo, una alegación al concurso convocado por el Ayuntamiento de Girona para la construcción y explotación de una zona de equipamientos deportivos en la zona de los antiguos cuarteles. Los arquitectos, que en el documento mantienen una postura muy crítica con el procedimiento municipal, consideran que el pliego de cláusulas está redactado con una mentalidad "mercantilista" y "ultraliberal" que deja en manos privadas la función de dirigir y ordenar el proceso urbanizador de la ciudad. "Entendemos que la ocasión se merece que el Ayuntamiento diseñe previamente un plan director conjunto, hecho con ilusión y rigor", reza el texto. El equipamiento ha originado una agria polémica, puesto que la oposición, de CiU, mantiene que se trata de "un concurso tramposo y hecho a medida", y ha denunciado hasta ocho infracciones a la Ley de Contratos de las Administraciones Públicas imputables al consistorio socialista. El presidente del Colegio de Arquitectos, Carles Bosch, aseguró ayer que son conscientes de que el proyecto se ha convertido en una polémica preelectoral, pero advirtió de que la toma de posición, aprobada mayoritariamente por la junta, responde únicamente a criterios urbanísticos. Aspectos formales El colectivo considera que un proyecto de tal envergadura, en el que la empresa adjudicataria debe construir en terreno municipal un centro cívico y una biblioteca, además del centro deportivo que gestionará durante 45 años, no se puede canalizar y controlar mediante un pliego de cláusulas y un esquema de planta. Asimismo afirma que el Ayuntamiento únicamente cuantifica "cuatro parámetros" y renuncia a aspectos formales y de calidad. En la alegación se asegura que el procedimiento municipal para la construcción de estos equipamientos constituye "un sarcasmo" hacia los concursos celebrados recientemente en diversas poblaciones de las comarcas gerundenses, con un notable éxito y una participación de alta calidad. "Parece que, más que una biblioteca, el Ayuntamiento defina las condiciones de un aparcamiento subterráneo", ironizó ayer Carles Bosch, quien añadió: "¿Al Ayuntamiento no le interesa cómo serán estos equipamientos?". En el documento se constata que el consistorio ha actuado en este proyecto con criterios muy restrictivos e incluso ha negado a los representantes del Colegio de Arquitectos la posibilidad de obtener fotocopias del expediente, y también que la documentación que rige el proyecto es de muy baja calidad. "Como profesionales de la arquitectura, nos sorprende tener que reivindicar a estas alturas la importancia del proyecto como instrumento que permite controlar la totalidad de las variables, cuantitativas y cualitativas, que intervienen en una obra", se lee en la alegación.