La Generalitat pide gestionar los impuestos pagados en Cataluña
El consejero de Economía de la Generalitat, Artur Mas, presentó ayer la propuesta de un pacto fiscal con el Estado, que comportará que la Generalitat recaude todos los impuestos pagados en Cataluña y ceda una parte de los mismo al Gobierno central. El proyecto del Gobierno autónomo es conseguir la capacidad normativa de varios impuestos, especialmente el de sociedades, para mejorar la competitividad. La dirección de Unió lamentó no haber conocido la propuesta de Mas antes de que éste la hiciera pública.
La fórmula que plantea el Ejecutivo catalán significa que la Generalitat recaudará todos los impuestos y se quedará con la mayor parte de la recaudación para la financiación de su Administración. La "cesta" de tributos para la Administración autonómica estará integrada por el 60% del IRPF; el 50% del impuesto de sociedades; el 50% del IVA; el 100% de los impuestos especiales (tabaco, bebidas y gasolina); el 100% del impuesto sobre la matriculación de vehículos, y el 100% de los tributos cedidos (sucesiones, patrimonio, transmisiones patrimoniales, actos jurídicos documentales y tasa sobre el juego). La propuesta, presentada ayer formalmente por el titular de Economía de la Generalitat en una conferencia en el Círculo Financiero en la sede de La Caixa, significa que el Gobierno central sólo recibiría el 40% del IRPF y el 50% del impuesto de sociedades y del IVA. Menos presión fiscal El pacto fiscal propuesto por el consejero Mas pretende también que se dote a la Generalitat de mayor capacidad normativa para poder decidir sobre los tributos ya cedidos -incluido el 30% del IRPF- y que también permita asumir mayor capacidad normativa sobre algunos aspectos del impuesto de sociedades y de los impuestos especiales. "Con la capacidad normativa que dispondría el Parlamento de Cataluña una vez alcanzado el pacto fiscal", precisó Mas, "alcanzaríamos una reducción de la presión fiscal individual de los ciudadanos." El consejero de Economía indicó que esta posible rebaja fiscal podría afectar especialmente al impuesto de sociedades para lograr así las mismas ventajas de competitividad de las que gozan algunas comunidades, como el País Vasco. También señaló que el único margen fiscal de maniobra de la Generalitat lo integran los tributos cedidos y propios que, en conjunto, ascienden a 280.000 millones de pesetas para un presupuesto global de dos billones de pesetas. A la conferencia de Mas acudieron el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, y otros cinco consejeros del Ejecutivo, entre ellos el titular de Obras Públicas, Pere Macias, quien unas horas antes había anunciado la intención de la Administración autonómica de rescatar gradualmente los peajes catalanes. Al acto acudieron los dirigentes de los bancos y cajas catalanes y los principales patronos de las empresas industriales. Según el esquema propuesto para el año 2002, la Generalitat podría gestionar todos los impuestos que se recauden en Cataluña; de esta manera "se produciría un acercamiento del servicio al ciudadano y una mejora en la gestión tributaria que repercutiría en la recaudación".
