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EL PROCESO DE PAZ

Los socialistas y Josu Ternera

El secretario general de los socialistas vascos, Nicolás Redondo Terreros, adelantó ayer que su partido acudirá a las reuniones de la Comisión de Derechos Humanos, aunque en ellas participe el exmiembro de la dirección de ETA José Antonio Urrutikoetxea, Josu Ternera.Redondo contradijo de esta manera al portavoz de la Ejecutiva del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, quien el viernes aseguró en Pamplona que el PSOE nunca se sentará en una mesa con Ternera, "y mucho menos en la comisión de Derechos Humanos". El parlamentario de Euskal Herritarrok Iñaki Antigüedad justificó ayer la presencia de Ternera en la comisión porque todo lo relacionado con los presos de ETA va a tener mucha importancia en ese foro durante esta legislatura. Las declaraciones del miembro de EH se produjeron en un debate radiofónico en el que el portavoz y posiblemente futuro presidente de ese foro, el peneuvista José Antonio Rubalcaba, consideró "normal" la designación del ex dirigente de ETA, que todavía no ha sido condenado.

Mientras tanto, el miembro del Foro Ermua Txema Portillo aseguró que la designación del ex dirigente etarra "demuestra el desprecio olímpico de HB por las instituciones". Para Portillo es igualmente sorprendente que PNV y EA aplaudan esta decisión, lo que a su juicio viene a demostrar que "en Euskadi existe un frente nacionalista claro y que este frente va a funcionar por encima de todo y por encima de las víctimas".

Alrededor de un millar de personas participaron ayer en San Sebastián en una manifestación en favor del traslado de presos de ETA a Euskadi convocada por las organizaciones juveniles vinculadas a las fuerzas del Acuerdo de Lizarra.

Nicolás Redondo, que participó en un acto político en Ortuella, se reunirá la próxima semana con el lehendakari Juan José Ibarretxe en la primera ronda de contactos bilaterales antes de que éste convoque la nueva mesa de partidos en la que también estará HB.

Redondo aseguró ayer que hay dos condiciones mínimas que deben cumplirse para que esa mesa cuente con su presencia: que los partidos que la formen se atengan a las reglas de juego democrático y que no se utilice la violencia como forma de presión.

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