Jordi Pujol afirma que el mercado español es secundario para Cataluña
El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, reivindicó anteanoche ante un grupo de empresarios del Vallès la necesidad de "realizar una ofensiva para obtener más poder político y financiero" y les invitó a dejar de lado el mercado español para concentrarse en el europeo. Pujol repitió que es imprescindible resolver "el problema" del sistema de financiación si Cataluña "quiere mantener su competencia y proyección internacional". El presidente enumeró algunos "elementos negativos" que pueden perjudicar el desarrollo de la economía catalana: "Pagamos por tener lo mismo que otros tienen sin pagar, lo cual nos resta competitividad". Se refería a los peajes, "un sobreesfuerzo que no nos permitirá desarrollarnos". La gratuidad de las autopistas es una de las reivindicaciones de la Cámara de Comercio de Sabadell, organismo que actuaba como anfitrión del acto. Un día antes, las cámaras de Sabadell, Terrassa y Manresa habían reclamado a la Generalitat y al Ministerio de Fomento la misma rebaja en los peajes para los vehículos pesados que han obtenido Tarragona y Lleida. Pujol espoleó a los empresarios a no perder la confianza en el mercado exterior y a dejar el español en un segundo plano: "El mercado español es secundario, en cambio el francés no lo es", dijo. Pero aún fue más lejos y afirmó que "el mercado español no existe", lo que existe es el "mercado europeo". Durante su intervención provocó murmullos varias veces y en especial cuando dijo que si la gente colapsa los servicios de urgencias de la sanidad pública es porque "los atienden muy bien", pero que él no va a esos servicios porque es "el presidente de la Generalitat". "Si fuera un ciudadano normal iría porque las urgencias funcionan muy bien". Al persistir los murmullos, añadió en tono de broma que él con una aspirina ya funciona.
