Farsa de la ONU en Angola
Pocas horas después de la firma del plan de paz de la ONU en 1994, Jonas Savimbi, jefe del grupo rebelde UNITA, arengaba a tus tropas (...) y describía el llamado Acuerdo de Lusaka como "un trozo de papel sin valor".
El Gobierno de Luanda, que tuvo su origen en una toma de poder marxista, apoyada por la URSS y Cuba, nunca ha inspirado confianza, y desde luego no la confianza de Savimbi, que lo ha combatido durante años. Pero la ONU, resentida entonces de su desastrosa actuación en Somalia el año anterior, estaba impaciente por declarar un triunfo. Durante los cuatro años siguientes, mientras la ONU gastaba 1,5 millardos de dólares y veía cómo 60 de sus miembros perdían sus vidas en Angola, continuaban los enfrentamientos. (...) A principios de esta semana, Kofi Annan aceptaba el fracaso y recomendaba que la misión de paz de la ONU fuera retirada. (...) Como en Kosovo, Camboya y Somalia, el conflicto angoleño demuestra que las misiones de paz no tienen sentido sin la garantía de que hay una paz que mantener. (...) Ahora que el segundo intento de la ONU de llevar la paz a Angola ha fracasado, parece que la guerra continuará indefinidamente. Como muchos otros conflictos en África, la guerra de Angola está provocada por animosidades étnicas y malos gobiernos. Esos problemas podrían resolverse si la ONU (...) respaldara sus soluciones con una fuerza adecuada, comprobando, por supuesto, que la solución propuesta tiene una oportunidad de establecer una democracia representativa viable y un principio de ley. (...)
22 de enero
